PALMA DE MALLORCA, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
El sindicato STEI-i ha considerado este lunes que el borrador del anteproyecto de la ley reguladora de la convivencia escolar y de la autoridad del profesorado podría suponer que esta autoridad por parte de los profesores se convirtiese en autoritarismo y, por ello, ha pedido la retirada del texto.
En un comunicado, la secretaria de Normalización Lingüística y Política Educativa del sindicato, Maria Antònia Font, ha advertido que una aprobación de esta normativa podría suponer que en las aulas se prohibiese hablar de temas como el cambio climático, el matrimonio homosexual o de la necesidad de los carriles bici.
Además, según ha apuntado, "una buena parte del currículum" de materias como historia, filosofía, o literatura "quedarían inmediatamente bajo sospecha" y autores como Martí i Pol, Antonio Machado, Karl Marx "serían, en la práctica, intratables".
El STEI-i ha considerado que las normas de convivencia en los centros pretenden, entre otras muchas cosas, recortar la libertad de cátedra, así como recortar la libertad de expresión y de opinión de los ciudadanos que también son profesores. Según el sindicato, el anteproyecto regula las sanciones al profesorado que exprese su opinión, y "pretende hacer desaparecer" símbolos como los lazos o camistas de apoyo al catalán.
Asimismo, ha opinado que el anteproyecto supone una burocratización de tareas y cambia la legislación vigente. "Todo por camuflar cómo quieren controlar y acallar el profesorado, algo que no conseguirán", ha remarcado el sindicato, que ha añadido que los profesores continuará haciendo bien su trabajo "educando en el sentido crítico a los alumnos, tal y como regula la legislación vigente".
En relación a la autoridad, el STEI ha hecho hincapié en que está a favor de dotar el profesorado de instrumentos legales para reforzar su autoridad y defenderse en los casos de agresiones y ha indicado que necesitan el apoyo de los servicios jurídicos de la Conselleria durante estos procesos.
Así, se han preguntado cómo la Conselleria pretende investir de autoridad a los docentes cuando, a la vez, les "quiere poner un esparadrapo en la boca" y ha tildado este hecho de "sarcasmo absoluto".
"Pensamos que la convivencia en una aula no se implanta por decreto", ha remarcado el sindicato, que ha pedido la retirada inmediata del anteproyecto y ha exigido que una futura normativa sea fruto de la negociación en las mesas pertinentes con los representantes legítimos del profesorado y que, además, pase por el Consejo Escolar de Baleares.
