La tasa de criminalidad balear cayó en 4,7 delitos por cada mil habitantes en 2009, un poco por encima de la media

Actualizado: miércoles, 17 marzo 2010 14:07

Delegación de Gobierno afirma que la crisis no ha repercutido en un repunte de delitos, ya que el año pasado descendió el número de robos

PALMA DE MALLORCA, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

La tasa anual de criminalidad se situó en Baleares durante 2009 en los 63,8 delitos y faltas por cada mil de habitantes, con un descenso de 4,5 delitos por millar de residentes respecto al ejercicio anterior, más acentuado que el retroceso que experimentó ese índice en la media española, de 3,7 hechos delictivos registrados, lo que supone un saldo a favor de las islas de 0,8 en una evolución "muy positiva" para la Administración central.

Así lo manifestó hoy el delegado del Gobierno en la Comunidad Autónoma, Ramón Socias, durante la presentación que realizó del balance de la criminalidad durante 2009, pocos días después de que presentara los datos estatales el Ministerio del Interior, del que destacó que se trata de la tasa "más baja desde 2000", en una tendencia que se inició en 2002, cuando se situó en su nivel máximo, con 91,7 delitos por millar, con 84.093 delitos en ese ejercicio, frente a los 69.935 del año pasado.

Concretamente, el representante del Estado en las islas resaltó que las cifras "hablan por sí mismas" y reflejan caídas en casi todos los segmentos, especialmente los robos. Con lo cual, consideró demostrado que la crisis económica no provoca una proliferación de los delitos, ya que éstos han seguido disminuyendo en plena recesión, dando como resultado que "la seguridad ciudadana no se ha resentido", gracias a las medidas de protección social adoptadas por todas las administraciones, dijo.

El resultado final de 2009, una vez transcurrido el año y la preocupación que conllevó el inicio de la recesión económica, constituye un "buen comportamiento de las cifras de delincuencia" en Baleares, debido a una "continua eficiencia" de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que además han visto incrementadas sus plantillas hasta los 3.392 agentes policiales, un 27% más que en 2003 y un 3,8% más que en 2008.

Así, los delitos contra el patrimonio se situaron el año pasado en los 24,5 casos por millar, cuatro casos menos que el ejercicio anterior. Y también bajaron de un año para otro los robos con violencia, que pasaron de 16,4 por cada mil habitantes a 14,9 por millar. Igualmente, descendieron los 'tirones' que se realizan en plena vía pública, al pasar de 3,1 a 2,9. Mientras que los robos con fuerza en viviendas experimentaron un descenso de 64,6 a 53,7, los de vehículos pasaron del 31,7 al 23,9, las faltas de lesiones del 2,57 al 2,38 y sólo repuntaron levemente las faltas por hurto, al pasar de 19,7 a 19,8 casos por mil residentes.

Esto se ha traducido también en un mayor volumen de delitos esclarecidos, que sube un 0,7 respecto al año anterior --cuando subió 4,2 puntos respecto al ejercicio anterior--, en una progresión "espectacular" que se inició en 2003, ya que en 2002 en la Comunidad Autónoma se resolvía un 24,3% de los hechos delictivos denunciados y ahora ese índice se sitúa en los 37,5%. También en ese periodo se ha incrementado el volumen de detenidos, de 85 a 154 por cada mil infracciones penales conocidas.

Por lo que se refiere a la tasa de criminalidad aplicada a los malos tratos en el ámbito familiar, ésta se situó durante 2009 en los 27,7 delitos por cada mil habitantes, la menor de los últimos tres años y casi la misma que en 2006 (27,6), un avance por el que Socias se felicitó y que atribuyó, en buena medida a las campañas publicitarias destinadas a concienciar a las víctimas sobre la necesidad de denunciar todos los casos de este tipo de delincuencia que se produzcan.

ASESINATOS DE ETA EN LA ESTADÍSTICA

Sin embargo, la tasa de homicidios dolosos y asesinatos repuntó, del 3,08 casos por millar de 2008 a los 3,74 casos por millar, una diferencia que el delegado del Gobierno atribuyó, entre otros factores, al asesinato por parte de la banda terrorista ETA de dos guardias civiles en el primer atentado con víctimas que cometió el grupo en Baleares, a finales de julio del año pasado, ya que ese índice venía descendiendo de forma acusada desde el año 2005.

Socias aclaró que las cifras que ofrece la delincuencia en Baleares están fuertemente influenciadas por la temporada turística, al ser totalmente distintos los resultados de los semestres de máxima y mínima actividad, una circunstancia que también afecta a Canarias. Además, la desviación se ve acentuada por la inclusión en los datos del ministerio, a partir de 2008, de los datos de seguridad vial, que se traducen en 1.485 delitos y faltas que no son relativos a la seguridad ciudadana.

"La estadística se hace sobre el millón de habitantes que tenemos de derecho en las islas --anotó Ramón Socias--, pero en los meses de verano nos vamos casi a los tres millones" reales. Un aspecto que la estadística no contempla, ya que se realiza sobre la población residente y no sobre una población flotante tan volátil como es el turismo que visita el archipiélago durante la temporada alta.