11-S.- Dos importantes miembros de Al Qaeda niegan que Moussaoui participara en los atentados

Actualizado: martes, 28 marzo 2006 23:19

ALEXANDRIA (VIRGINIA, EEUU), 28 Mar. (EP/AP) -

Dos importantes miembros de la red terrorista Al Qaeda, presos en Estados Unidos, aseguraron que Zacarías Moussaoui no participó en los atentados del 11-S, y uno de ellos le calificó de inadaptado que se negaba a cumplir órdenes, en declaraciones hechas hoy ante el tribunal.

En ambos casos, sus declaraciones fueron leídas al jurado porque el Gobierno se negó a permitir que comparecieran. Waleed bin Attash, conocido como Jallad, es considerado autor intelectual del ataque suicida de 2000 contra el buque de la armada Cole y uno de los primeros planificadores de los atentados del 11 de septiembre de 2001. Afirmó que por lo que él sabía, Moussaoui no debía cumplir ningún papel en los ataques.

Otro preso, identificado como Sayf al Adl, miembro dirigente del comité militar de Al Qaeda, declaró a los interrogadores que Moussaoui era "un 'yihadista' confirmado, pero no iba a participar en la misión del 11 de septiembre de 2001".

La defensa presentó las declaraciones escritas de estos presos para restar importancia a la del propio Moussaoui, quien señaló ayer que debía secuestrar un quinto avión el 11-S y estrellarlo contra la Casa Blanca. Los abogados trataron de compensar así los daños que se autoinfligió al declarar a pesar de que le habían recomendado no hacerlo.

Jallad indicó que Moussaoui se comportó como un elemento inestable durante un viaje en 2000 a Malasia, donde se reunió con miembros de un grupo afiliado a Al Qaeda. Jallad agregó que Moussaoui violaba las normas de seguridad del grupo.

Otro testigo, Mustafa Ahmed al Hawsawi, que participó en la operación del 11-S desde su puesto en Dubai, afirmó que había visto a Moussaoui en una casa de huéspedes de Al Qaeda en Kandahar (Afganistán), en el primer semestre de 2001, pero que nunca habló ni tuvo trato con él.

Moussaoui, un francés hijo de inmigrantes marroquíes, de 38 años de edad, se ha declarado culpable de querer secuestrar un avión para un atentado posterior al 11-S. El Gobierno estadounidense ha pedido para él la pena capital, pero debe demostrar que de alguna manera fue responsable de alguna muerte en los atentados. El jurado también puede condenarlo a perpetua.