ROSTOCK (ALEMANIA), 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Al menos 30.000 manifestantes se congregaron hoy en la ciudad de Rostock, en el norte de Alemania, para protestar contra la cumbre del G-8 que se celebra la próxima semana en la localidad de Heiligendamm y bajo el lema "otro mundo es posible", según informaron las autoridades.
Alrededor de 13.000 policías están desplegados para garantizar la seguridad mientras que helicópteros policiales sobrevuelan a los miles de manifestantes que han llegado desde toda Alemania y otros puntos de Europa. También están presentes los agentes antidisturbios y como medida adicional se está gravando la manifestación.
Un grupo de manifestantes atacó vehículos policiales con piedras, botellas y bombas de pintura, según las autoridades, que precisaron que el hotel en el que estaba previsto que se alojara la delegación estadounidense durante el G-8 también fue atacado.
La mayoría de las tiendas situadas a lo largo del recorrido de la marcha protegieron sus escaparates antes de las protestas, con la excepción de los puestos y restaurantes de comida rápida.
Decenas de grupos diversos, desde comunistas, anarquistas y ecologistas, están participando en la protesta con eslóganes en los que reclaman al G-8 que luchen contra el sida, la pobreza en Africa o el cambio climático, mientras que otros se cuestionan la legitimidad de la existencia de este grupo, que reúne a los siete países más ricos y Rusia.
La protesta se produce tres días antes de la cumbre de los jefes de Estado del G-8 --Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Italia, Alemania, Canadá, Rusia y Japón-- en Heiligendamm. Los manifestantes se congregaron durante la mañana en dos puntos de la ciudad, para recorrer dos trazados diferentes de 5 kilómetros cada uno hasta el centro de Rostock, donde coincidirán esta tarde y se pronunciarán los discursos, previos a un concierto.
