Los acusados por el 11-S afirman que los ataques fueron una "bendición" por la actuación "criminal" de EEUU

Actualizado: miércoles, 11 marzo 2009 18:42


NUEVA YORK, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los cinco acusados por los atentados del 11-S, presos en la prisión de la base naval de Guantánamo (Cuba), reconocen plenamente su responsabilidad por un ataque que califican de "bendición" y que les llena de "honor", al tiempo que acusan a las autoridades estadounidenses de "criminales profesionales" y afirman que les pagarán con la misma moneda.

"Sois la última nación del mundo que tiene derecho a hablar sobre civiles y asesinatos de civiles", explican los cinco imputados en una carta dirigida al Gobierno norteamericano, al cual califican como "criminal profesional, con todos los significados que estas palabras conllevan", según la CNN.

"Por lo tanto, os trataremos igual. Os atacaremos como vosotros nos habéis atacado a nosotros, y quien quiera que inicie los ataques es la parte culpable", señalan en el mensaje de seis páginas firmado por los cinco acusados, entre los que está el presunto 'cerebro' del 11-S, Jalid Sheij Mohamed.

Todos ellos estaban siendo juzgados cuando Barack Obama tomó posesión como presidente el pasado 20 de enero, tras lo cual ordenó la paralización de todos los procesos de Guantánamo. El caso se encuentra a la espera de lo que decida la nueva Administración.

Algunos fragmentos de este documento ya fueron filtrados ayer al diario 'The New York Times', que señalaba que en el texto se utiliza el término árabe de asamblea consultiva para describir a los cinco hombres, el "Consejo Shura del 11-S".

Los imputados aseguran que cometieron los atentados de Nueva York y Washington, que provocaron cerca de 3.000 muertos, como represalia por las acciones de Estados Unidos y sus aliados en Oriente Próximo, y acusan a este país de ser "la nación terrorista número uno".

"Para nosotros, las acusaciones que habéis presentado contra nosotros no son acusaciones. Para nosotros son una placa de honor que llevamos con orgullo. Muchas gracias a Dios por su amable gesto y elegirnos para cometer el acto de la yihad --guerra santa-- para su causa y defender al Islam y a los musulmanes", señalan.

Ante los cargos por "atacar civiles" y "atacar objetivos civiles", los cinco se preguntan quién cometió realmente estos ataques. "¿Somos nosotros o vosotros?", cuestionan en el texto, de seis páginas y titulado 'La respuesta islámica a las nueve acusaciones del Gobierno'.

VENGANZA POR CONFLICTOS EN ORIENTE PRÓXIMO

Los imputados vinculan el 11-S con los ataques en "Palestina y Líbano facilitando apoyo político, militar y económico al terrorista Estado de Israel que, a cambio, ataca civiles inocentes desarmados", al tiempo que destaca las actuaciones de Estados Unidos en Irak y el lanzamiento de las bombas atómicas en las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en 1945.

También contestan al cargo de "violación de las leyes de la guerra" hablando de la ocupación de los territorios palestinos y Líbano así como de los palestinos desplazados, la ocupación de Irak y Afganistán y los malos tratos a presos en lugares como la prisión de Abu Ghraib.

"Si no respetáis a la gente inocente en nuestros países, nosotros haremos lo mismo, exponiéndoos al peligro y al secuestro por aire, mar y tierra", señalan en el mensaje, donde también citan varios versos del Corán. "Nuestra religión es una religión de miedo y terror para los enemigos de Dios: los judíos, los cristianos y los paganos. Con la ayuda de Dios, somos terroristas hasta la médula", añaden.

Debido a que algunos de los acusados ya habían reconocido durante las llamadas comisiones militares de la base naval que habían planeado los atentados del 11-S y que querían convertirse en mártires siendo ejecutados, no está claro lo que intentan conseguir con este documento, que fue entregado al tribunal el 5 de marzo. No obstante, lo que resulta novedoso es que los cinco asuman su responsabilidad.

En el texto los acusados también describen la planificación de los ataques en Nueva York y Washington, así como la muerte de estadounidenses como un modelo de actuación islámica, y aseguran que las acusaciones contra ellos del Gobierno norteamericano no les causan vergüenza. "Para nosotros no hay acusaciones. Para nosotros no hay pérdida de honor", apuntan.

Al parecer, el detenido que escribió la nota lo hizo en las reuniones periódicas que las autoridades de Guantánamo les permiten mantener en el campo de detención, aunque sin abogados.