El contingente español acudió ayer para evacuar al resto de cooperantes hasta la sede de su organización en Qala-I-Now
MADRID, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
Dos trabajadores de nacionalidad afgana de la ONG 'World Vision' fueron asesinados ayer lunes tras ser secuestrados la víspera en un ataque contra el convoy en el que viajaban por la región de Bala Murgab, a unos 50 kilómetros de la ciudad de Qala-I-Now, capital de la provincia de Badghis, liderada por el Equipo de Reconstrucción Provincial (PRT, por sus siglas en inglés) que dirige el contingente español.
Según confirmaron fuentes del Ministerio de Defensa español, los dos trabajadores, personal de seguridad que protegía a los cooperantes civiles, fueron secuestrados durante el ataque del pasado domingo y sus cadáveres fueron hallados un día después. Tras el ataque insurgente, ayer lunes por la noche se registraron disparos en la zona, que estaba siendo custodiada por la Policía local, y los cooperantes civiles de 'World Vision' --once afganos y una mujer keniana-- solicitaron al contingente español que les evacuara hasta Qala-I-Now, donde se encuentra su sede.
Así, una patrulla de la Base 'General Urrutia', sede del PRT español, se trasladó hasta el lugar y llevó a los doce trabajadores hasta sus oficinas en la capital de Badghis. Las autoridades locales han abierto una investigación sobre los hechos.
Por su parte, un portavoz de la organización no gubernamental indicó a Europa Press que el ataque se produjo la noche del domingo contra la oficina de 'World Vision' en Badghis. Según la información de que dispone, se escucharon disparos y explosiones como de granadas, y la oficina quedó totalmente destruida.
En un principio se dio por perdidos a los dos trabajadores, pero el lunes la Policía afgana informó del hallazgo de sus cuerpos. Como consecuencia del ataque, 'World Vision' ha decidido suspender temporalmente todas sus actividades en Badghis, incluidos los traslados de personas y vehículos por la zona.
La provincia de Badghis, en la que se encuentra el mando de toda la agrupación española en Afganistán, ya fue escenario el pasado mes de mayo de un ataque similar contra trabajadores civiles. En aquella ocasión, un convoy, que se dirigía por la carretera que une Qala-I-Now y Herat, fue atacado por insurgentes y como consecuencia de los disparos falleció un médico del hospital de Qala-I-Now y otro civil perdió una pierna.
El último ataque registrado contra efectivos españoles en Afganistán el pasado 14 de agosto en la provincia de Farah cuando un convoy con agentes del Centro Nacional de Inteligencia fue atacado con armas ligeras por un grupo de rebeldes sin que se registraran heridos ni daños materiales de consideración.
España mantiene en Afganistán su segundo mayor contingente militar, con un total de 689 efectivos con apoyo del destacamento aéreo de Manás (Kirguistán), dotado de dos aviones 'Hércules' C130. El grueso del contingente se encuentra emplazado en la Base de Apoyo Avanzado de Herat (FSB), en la zona oeste del país. España lidera esta base logística multinacional y aporta la Compañía de Reacción Rápida (QRF), unos 125 efectivos que se encargan de garantizar la seguridad en las cuatro provincias de la zona oeste.
El mando del contingente español, el coronel paracaidista Fernando Lázaro, está destinado en la Base General Urrutia (Badghis), al frente del Equipo de Reconstrucción Provincial (PRT), compuesto por unos 190 militares y personal civil español y afgano de la AECI.
