KABUL, 22 Abr. (EP/AP) -
Un miliciano suicida se inmoló este domingo en el este de Afganistán, en la localidad de Jost, matando a seis civiles e hiriendo a otras 40 personas, según fuentes oficiales. En la misma localidad otro ataque con bomba contra un puesto de un mercado, motivado por una disputa tribal, se cobró la vida del dependiente e hirió a otras ocho personas.
Por su parte, la Policía, siguiendo una pista, intentó parar a un hombre sospechoso, según explicó el jefe provincial de Jost, el general Mohammad Ayub, quien precisó que la Policía disparó al individuo cuando éste intentó salir huyendo de los agentes, momento en el que estalló su carga explosiva adosada contra la multitud.
Por su parte, el director de Salud Pública de Jost, Mohammad Mohammadi, confirmó la muerte de seis civiles y cifró en 40 los heridos en uno de los atentados en dicha localidad, la mayoría de ellos, incidió, no revestían gravedad, aunque 15, matizó, tuvieron que ser hospitalizados por las importantes heridas que recibieron. Entre los heridos, precisó, se encuentran también dos agentes de Policía.
Previamente, otro atentado con bomba contra una de las tiendas en un mercado municipal provocó la muerte del dependiente, al tiempo que la deflagración hirió a otras ocho personas, según Ayub, quien incidió en que dicho ataque estuvo motivado por disputas entre tribus.
Por otra parte, el jefe de la Policía provincial de Laghman, Abdul Karim, confirmó hoy la muerte de cuatro personas, entre ellas, dos agentes de los servicios de Inteligencia, por la explosión de una bomba colocada en la carretera, en el este de Afganistán.
Según explicó el jefe policial el artefacto explosivo fue activado a distancia al paso de un vehículo del servicio de Inteligencia afgano, en la capital de la provincia, Mehtar Lam, matando a sus cuatro ocupantes a bordo, los dos agentes de Inteligencia, un soldado y su chófer. "El enemigo no es lo suficientemente valiente para luchar cara a cara contra el Ejército afgano", lamentó Karim, quien denunció su "recurso a los (atentados) suicidas y bombas en las carreteras".
En la vecina provincia de Paktia, presuntos milicianos talibán emboscaron esta madrugada una patrulla de la Policía en el distrito de Zormat, donde estalló un enfrentamiento que se saldó con la muerte de cinco milicianos y un policía muertos, según confirmó el jefe de la Policía de Paktia, Abdul Rahman Sarjan, quien informó de la recuperación de los cinco cadáveres de milicianos, sus armas y uno de los vehículos empleados en la emboscada.
Por su parte, tropas conjuntas estadounidenses y afganas dieron muerte ayer en la provincia de Nangarhar a una persona, presunto miliciano, al tiempo que detuvieron a otras nueve al hilo de un registro efectuado, según explicó la coalición en un comunicado, sin precisar la localidad.
Según el mismo, el complejo registrado era utilizado por personas a las que la coalición acusa de estar implicadas en "facilitar" la ejecución de ataques suicidas en las últimas semanas. "Durante la operación, un miliciano cogió un arma y fue disparado y abatido por fuerzas conjuntas", explicó la coalición en el comunicado.
