NUEVA YORK, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, expresó ayer su gran preocupación por el brusco incremento de muertes de civiles afganos en los primeros meses del año.
"Un total de 1.445 civiles habían muerto hasta agosto de 2008, lo que supone un aumento del 39 por ciento frente al mismo periodo del año anterior", afirmó Pillay.
Esta cifra incluye a las víctimas de los bombardeos del Ejército afgano y la fuerza internacional, así como de los ataques de los rebeldes talibán. Agosto fue un mes especialmente sangriento, con 330 civiles muertos, 92 de los cuáles fallecieron por bombardeos de las fuerzas afganas e internacionales en el oeste del país.
Éste es el mayor número de muertes de civiles ocurridas en Afganistán en un solo mes desde el derrocamiento del régimen talibán en 2001, informó el centro de noticias de la ONU.
