MADRID, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las empresas mineras europeas, asiáticas y norteamericanas radicadas en África evaden cada año alrededor de 68.000 millones de euros al fisco a través de contratos secretos y falsificaciones de los balances de cuentas y gracias a la complicidad de los dirigentes políticos locales, según revela un informe publicado por varias organizaciones no gubernamentales.
El informe, publicado conjuntamente por las ONG ActionAid, Christian Aid, Third World Network Africa, Tax Justice Network Africa y Southern Africa Resource Watch, muestra varios ejemplos de los procedimientos de que se valen las empresas para evadir impuestos, como los contratos entre Estados y compañías que nunca se hacen públicos y determinados acuerdos fiscales 'ad hoc' suscritos por gobiernos y ministros con corporaciones extranjeras.
Por ejemplo, algunas "empresas carentes de escrúpulos" obtienen exenciones impositivas de Gobiernos "a los que amenazan con trasladar a otros países sus actividades", declaró el responsable de la organización no gubernamental ActionAid para África, Brian Kagaro. Aparte, las compañías falsifican los balances de cuentas, reduciendo artificialmente los márgenes de beneficio, para evadir impuestos, añadió.
Según ActionAid, los países afectados por la falta de transparencia en los contratos y por las evasiones de impuestos se caracterizan por un alto nivel de degradación ambiental y por la inestabilidad social. Dos ejemplos claros son los de la República Democrática del Congo y Sierra Leona, países ricos en recursos naturales y castigados por los conflictos internos y la injerencia extranjera.
"Un paso efectivo para acabar con la pobreza en África es garantizar que todas las compañías multinacionales mineras pagan las cantidades de impuestos que les corresponden", declaró Kagaro. "Si lo hiciesen, los Gobiernos podrían financiar programas sociales de bienestar con los beneficios generados por los impuestos y sin necesidad de pedir el dinero en el extranjero", añadió.
"Los contratos mineros y los pagos a los gobiernos deben ser sometidos de forma rigurosa al escrutinio de los Parlamentos a fin de mejorar la contabilidad en este sector", continuó Kagaro. "Debemos reforzar la capacidad de las autoridades nacionales reguladoras de impuestos y racionalizar las normas internacionales de contabilidad", agregó.
