Africa.- Moratinos viajará a final de mes a Mauritania, Senegal y Cabo Verde

Actualizado: miércoles, 31 mayo 2006 23:56

Critica el discurso "tremendista" sobre la crisis de la UE y asegura que Marruecos no rechaza la autodeterminación del Sáhara Occidental

MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Angel Moratinos, anunció hoy que viajará a finales de junio a Mauritania, Cabo Verde y Senegal, tres países clave en la actual crisis provocada por una nueva oleada de inmigración ilegal en 'cayucos' desde la costa atlántica africana a Canarias.

El ministro hizo este anuncio durante una comparecencia en la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado, donde acudió a presentar el balance de dos años de política exterior del Gobierno del PSOE, y a debatir sobre la situación de Oriente Próximo y Latinoamérica.

Moratinos destacó el compromiso del Gobierno con Africa y precisó que dentro de 15 días se presentará de manera detallada el 'Plan Africa', cuyas líneas generales ya aprobó el Consejo de Ministros.

Respecto a las medidas inmediatas de lucha contra la inmigración ilegal, señaló que la vigilancia preventiva permitió en 2004 reducir en un 50% la llegada de pateras por el Mediterráneo, y confió en que la extensión del Sistema de Vigilancia SIVE a la fachada atlántica permita una reducción "similar" de las embarcaciones en esta zona.

El jefe de la Diplomacia insistió también en la necesidad de que los países del Magreb apuesten por su integración regional, y para ello es "esencial" resolver el problema del Sáhara Occidental, con el que mostró su "compromiso activo" para que se alcance una solución "política, justa, duradera, mutuamente aceptable por las partes y que incluya el ejercicio del derecho de autodeterminación" por parte de los saharauis.

Sobre el tema del Sáhara, el ministro tuvo que afrontar el pesimismo expresado por el senador 'popular', Josep Piqué, y por el de Coalición Canaria (CC), José Mendoza, que tachó de "cada vez más chula" la posición de Marruecos en su "desprecio de los elementos básicos" fijados por la comunidad internacional para lograr una solución.

Moratinos, por su parte, afirmó que su papel no es defender a Marruecos, pero dijo que "no es verdad que Marruecos rechace la autodeterminación", porque ha aplaudido la última resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, que recoge este principio, sino que "contempla otras posibilidades". Recordó además que el difunto Rey Hassan II sí hizo declaraciones de apoyo al principio de la autodeterminación, antes de que comenzaran los trabajos para el primer Plan de Arreglo de 1990.

En su comparecencia, el ministro afirmó rebelarse contra el discurso "pesimista y tremendista" que pesa sobre la UE y la Constitución europea, y destacó que los ministros de Exteriores de la Unión "han puesto en orden los procedimientos" para debatir sobre el futuro del Tratado. "Todos coincidimos en que el marco y el contenido constitucional son esenciales y que en 2009 tiene que estar resuelto ese marco", precisó.

Rechazó además la acusación de "irrelevancia" de la UE lanzada por Piqué y dijo que la prueba de que la Unión va bien son el gran número de peticiones de ingreso que llegan "casi de todo el mundo".

Para Piqué, en cambio, la UE ha perdido peso porque el eje del mundo se ha desplazado al Pacífico y, además, la contribución actual de España a la UE "no es precisamente modélica", ya que el "cambio en las reglas del juego" en el sector energético ha motivado la apertura de un expediente por Bruselas, dijo en relación al decreto que amplió las competencias de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) para analizar la Oferta Pública de Adquisición (OPA) de E.ON sobre Endesa.

El ministro expuso en la comparecencia los ejes básicos de la política exterior española en estos años, incluyendo el aumento de la ayuda al desarrollo, la lucha contra el terrorismo y el aprovisionamiento energético y el "multilateralismo eficaz", que calificó de "principal instrumento con que cuenta la política exterior".

En este sentido Piqué alertó de que con este enfoque se corre el riesgo de que la voz de España "se diluya" y no se defiendan eficazmente los intereses. Además, expresó su escepticismo por la Alianza de Civilizaciones y dejó claro que "España no es la ONU", sino que pertenece a Occidente y tiene "valores y derechos que ha costado muchos siglos conseguir" como la libertad y la igualdad. "No estamos dispuestos a discutirlos con otros países que no los respetan", añadió.

Moratinos tuvo que dedicar tiempo a decir que si el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no viaja mucho al exterior es por la apretada agenda interna, pero que en lo que queda de año viajará a todas las regiones clave para España.