BERLÍN, 6 Ago. (EP/AP) -
La Fiscalía alemana informó hoy de que volvió a abrir una investigación sobre dos soldados de las fuerzas especiales germanas acusados de maltratar a un ciudadano turco nacido en Alemania cuando fue detenido en Afganistán.
Murat Kurnaz, que después estuvo años detenido en la prisión norteamericana de Guantánamo, sostiene que los dos soldados alemanes acudieron en 2002 a un campo cerca de Kandahar para interrogarlo y que uno de ellos le estrelló la cabeza contra el suelo.
Los fiscales de la ciudad de Tuebingen, en el sur de Alemania, dijeron en enero que estaban investigando a dos miembros, que no identificaron, de las fuerzas especiales alemanas desplazadas en Afganistán como parte de la coalición liderada por Estados Unidos. Sin embargo, el caso fue archivado en mayo por falta de pruebas, aunque reconocieron que todavía había "dudas sobre la versión de los hechos de los soldados".
El fiscal Walter Vollmer explicó que se ha vuelto a abrir el caso porque el abogado de Kurnaz presentó dos nuevos testigos, dos personas de Reino Unido que fueron detenidas en Afganistán junto con Kurnaz. Vollmer, que no hizo públicos los nombres de los testigos, explicó que los fiscales buscarán los nuevos testimonios.
Kurnaz fue arrestado en 2001 en Pakistán, entregado a las autoridades de Estados Unidos y detenido en el campo de prisioneros de Guantánamo bajo sospecha de terrorismo hasta su liberación, en 2006, cuando un juez federal determinó que las pruebas presentada no justificaba su detención.
Por su parte, el Ministerio de Defensa alemán informó de que los soldados alemanes recordaban la presencia de un germanoparlante entre los prisioneros a los que vigilaban en Kandahar, pero que el único contacto que recuerdan haber tenido fue cuando uno de los soldados llamó al hombre.
