Los Aliados abren hoy el debate sobre la política nuclear de la OTAN

Actualizado: jueves, 22 abril 2010 10:45


BRUSELAS, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -

Los ministros de Exteriores de la OTAN hablarán, por primera vez desde que cinco aliados europeos lo pidieran, sobre la política nuclear de la Alianza y la conveniencia o no de reducir la presencia de armas nucleares en el viejo continente, durante la reunión informal de este jueves y el viernes en Tallín, en la que también abordarán la situación en Afganistán, las relaciones con Rusia y el nuevo concepto estratégico de la OTAN.

"No saldrán grandes decisiones, pero sí será el principio del debate", explicaron fuentes diplomáticas que señalaron la "complejidad" del tema y las dudas de algunos países sobre el valor militar y "disuasorio" de este tipo de armamento.

Los ministros tratarán esta cuestión en la cena del jueves, después de que cinco de ellos --los de Alemania, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo y Noruega-- reclamaran a principios de año una revisión de la estrategia nuclear de la Alianza Atlántica y defendieran el desarme en Europa.

El propio secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, descartó cualquier tipo de resolución en la cita de esta semana, pero dejó claras las bases de cualquier debate en cuanto que "ningún aliado tomará decisiones de manera unilateral" y del carácter "disuasorio" de las armas nucleares.

"Mientras haya en el mundo países con armas nucleares, la OTAN necesitará una fuerza de disuasión nuclear", recalcó Rasmussen, que puso como ejemplo de amenaza a Irán.

El debate se produce, además, semanas después de que Rusia y Estados Unidos firmaran el nuevo acuerdo para reducir su armamento nuclear (START) y que prevé reducir en un 25% el arsenal atómico de las dos potencias.

Las discusiones se enmarcan dentro de un debate más amplio sobre la revisión del concepto estratégico de la OTAN que se espera aprobar en la Cumbre del próximo mes de noviembre en Lisboa.

En la agenda de los ministros también figuran las relaciones con Rusia, las operaciones en Afganistán y la posibilidad de intensificar el diálogo con Bosnia y Herzegovina a través del Plan de Acción para la Adhesión (MAP), un proceso estancado por las dudas de algunos aliados respecto a los esfuerzos de Bosnia.