Alianza.- Zapatero anuncia que nombrará un coordinador para el plan nacional de la Alianza de Civilizaciones

Actualizado: martes, 15 enero 2008 12:14

Dice que la idea quiere "contribuir a aislar el discurso extremista de los que piensan que su religión es la única y debe ser impuesta"

MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy el próximo nombramiento de un coordinador, dependiente de Moncloa, para poner en marcha el plan nacional que desarrollará en España el proyecto de la Alianza de Civilizaciones, auspiciado por España y Turquía y que hoy es ya una iniciativa de la ONU.

Así lo expuso en la inauguración del I Foro de la Alianza de Civilizaciones, que arrancó hoy en Madrid, pero donde no reveló el nombre del coordinador. La persona que hasta la fecha más ha trabajado desde Presidencia del Gobierno en el proyecto de la Alianza de Civilizaciones es el diplomático Máximo Cajal.

El jefe del Ejecutivo definió en su intervención la Alianza como "algo más que un diálogo de civilizaciones". "Es una apuesta por la acción, la iniciativa, el tomar partido. Acción frente a la intolerancia, el radicalismo, el fundamentalismo y para el entendimiento, el respeto y el reconocimiento del que no piensa como nosotros, para el encuentro, en definitiva, para la paz, el deseo mas ampliamente sentido por todos los ciudadanos de este mundo", recalcó.

Zapatero advirtió de que la Alianza se consolidará "en la medida en que los Estados vayan integrándola en sus políticas nacionales y en sus políticas de proyección hacia el exterior y en las relaciones internacionales", con el fin de demostrar que es posible una "colaboración positiva entre el mundo islámico y el occidental que desmienta el supuesto paradigma inexorable del enfrentamiento entre civilizaciones y culturas".

El jefe del Gobierno se refirió a que son razones "históricas, geográficas, culturales y de seguridad" las que mueven a España a apostar por la Alianza de Civilizaciones, sin olvidar que la creación de un plan nacional para desarrollar la iniciativa obedece también a mantener la "coherencia política", ya que Zapatero fue el primer impulsor de la iniciativa.

CONTRA EL USO POLÍTICO DE LA DIVERSIDAD

La Alianza de Civilizaciones, dijo Zapatero, "pretende movilizar a esas grandes mayorías de paz que creen en el entendimiento y el respeto a las distintas culturas y quiere ayudar a contrarrestar la utilización política de la diversidad, que es sin duda alguna una de las mas detestables formas de populismo y de utilización de la noble tarea que representa la política del servicio público".

Asimismo, incidió que el proyecto "quiere contribuir a aislar los discursos extremistas e intolerantes de aquellos que piensen que su religión es la única y debe ser impuesta a todos, que su cultura es la única y ha de estar al servicio de fines políticos de dominación".

Estos objetivos se pueden alcanzar, según Zapatero, proponiendo "recomendaciones políticas de carácter practico que puedan ser aplicadas en la sociedad civil en su conjunto en cuatro ambitos prioritarios: la educación, la juventud, la migración y los medios de comunicación".

En estas cuatro áreas se centran las casi 60 medidas "de corto, medio y largo plazo" que figuran en el plan nacional de España para desarrollar la Alianza y que van destinadas a "favorecer el conocimiento mutuo y el aprecio de la diversidad", a "promover los valores cívicos y una cultura de paz", a "mejorar la integración y capacitación de los inmigrantes, con especial énfasis en los jóvenes" y a promover y difundir la idea de la Alianza de Civilizaciones.

ESPAÑA, UN PAÍS DE PAZ

Asimismo, aprovechó para calificar a España como "un país de paz, que defiende la diversidad cultural, que respeta todas las civilizaciones, ampara todas las religiones, que sabe, por propia experiencia histórica, que el enriquecimiento es normalmente el fruto de la diversidad y que está convencido de que el siglo XXI (...) debe estar presidido por el entendimiento, la convivencia, la paz, la reducción de los conflictos y desigualdades en el mundo" para garantizar el "progreso".

Zapatero destacó el gran apoyo político que, a su juicio, la Alianza ha suscitado --mas de 80 Estados y organizaciones internacionales forman parte del Grupo de Amigos de la iniciativa creado en la ONU-- y consideró que este respaldo ha sido posible porque la propuesta "ha llenado un vacío" e "identifica un problema real: gestionar la diversidad en un mundo globalizado", a través también de un enfoque político.

Estos problemas relacionados con la diversidad se ven agudizados, continuo Zapatero, por conflictos "históricamente enquistados o que tienen la perspectiva de convertirse" en nuevos conflictos congelados, "ya sea en los Balcanes, en Oriente Medio, en Afganistán o en Sudán" y que tratan de ser utilizados de "manera interesada por sectores extremistas y radicales invocando conflictos religiosos o culturales, supuestamente insolubles, para justificar una ideología que predica el enfrentamiento, el odio y que utiliza como instrumentos, en ocasiones, la violencia, el terrorismo y el asesinato de inocentes".

Para hacer frente a los retos del siglo XXI, según Zapatero, hay que dotarse de "nuevas herramientas", como la Alianza, que pretende promover el "entendimiento" entre civilizaciones, culturas y "distintas formas de haber vivido la historia y el mundo contemporáneo".

Zapatero espero que el Foro inaugurado hoy sirva como "marco para la presentación de proyectos e iniciativas concretas" y de "amplia caja de resonancia" para que "todos los actores puedan poner en valor aquello que están haciendo a favor de la gestión de la interculturalidad".

Al discurso de Zapatero asistieron la vicepresidenta primera del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega; los ministros de Asuntos Exteriores y de Cooperación y Justicia, Miguel Angel Moratinos y Mariano Fernández Bermejo respectivamente; el ex ministro de Justicia Juan Fernando López Aguilar y los presidentes del Congreso y del Senado, Manuel Marín y Javier Rojo.