Argentina.- Los peritos ratifican que la discoteca en la que murieron 194 personas en 2004 era una "trampa mortal"

Actualizado: miércoles, 3 septiembre 2008 22:54

BUENOS AIRES, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -

Varios peritos que declararon hoy como testigos en la causa abierta por el incendio en una discoteca de Buenos Aires en el que murieron 194 personas en 2004 afirmaron que el acceso a la sala estaba cerrado "con candado y cables" y que era una "trampa mortal".

Por su parte, el abogado defensor del empresario Omar Chabán, gerente de la sala Cromañón de Buenos Aires donde se produjeron los hechos, confirmó que su defendido hablará cuando finalicen los testimonios de los peritos.

El tribunal oral que juzga a Chabán y la banda de rock Callejeros, que actuaba en la sala Cromañón donde se desató el incendio, comenzó a escuchar a los testigos, empezando por varios testigos aportados por las partes.

"Las puertas de emergencia representaban una trampa mortal", según los testimonios de los ingenieros y arquitectos que declararon en la causa. Además, indicaron que la salida era indicada como la única posibilidad de salida en caso de emergencia por un cartel indicativo.

"En el momento de la tragedia, la gente corrió hacia donde estaba el cartel de salida y, al encontrarse con el acceso cerrado, el mismo se convirtió en una trampa mortal", indicó uno de los profesionales ante la Corte que lleva adelante el proceso.

El abogado Pedro D'Attoli confirmó que Omar Chabán, uno de los 15 imputados por la muerte de 194 personas en el incendio pidió prestar declaración frente a los magistrados, y que lo hará cuando terminen de hacerlo los peritos oficiales y de la querella.

De acuerdo a lo expresado por el magistrado, la decisión de hablar fue tomada ayer, en conjunto, entre la defensa y el imputado. Si bien no es seguro cuándo ocurrirá, se estima que declare entre el lunes y el miércoles de la semana que viene.

El empresario Omar Chabán está acusado de "estrago doloso seguido de muerte y cohecho activo", figuras que sumadas podrían terminar en una condena de hasta 20 años de cárcel, en caso de que fuera hallado culpable.