NUEVA YORK, 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Policía de Países Bajos detuvo este lunes en el aeropuerto de Amsterdam a dos personas con nombres árabes en cuyo equipaje se encontró material sospechoso, si bien ni las autoridades holandesas ni las estadounidenses, que fueron las que proporcionaron la información para el arresto, han confirmado que los arrestados tuvieran intenciones terroristas.
Los detenidos habían tomado un avión de Chicago a Amsterdam, y fue a su llegada al aeropuerto de Schiphol de la capital holandesa cuando fueron detenidos.
Según fuentes oficiales estadounidenses citadas por la cadena CBS, en el equipaje de uno de los detenidos, Ahmed Mohammed Nasser al Soofi, se pudo hallar un dispositivo similar a una bomba, pero sin poder explosivo, lo que ha llevado a los investigadores a pensar que los detenidos podrían estar probando las medidas de seguridad aeroportuarias de Estados Unidos.
Según las fuentes antes citadas, Al Soofi, además de la bomba falsa, llevaba en sus dos maletas facturadas 7.000 dólares en efectivo (unos 5.500 euros), siete teléfonos móviles --algunos de los cuáles estaban escondidos en el interior de botellas vacías-- y relojes escondidos en el interior de recipientes de champú.
Estas maletas no viajaron con los dos detenidos hasta Amsterdam, sino que fueron desviadas al aeropuerto de Dulles, cerca de Washington, donde fueron confiscadas por las fuerzas de seguridad de Estados Unidos.
Según CBS, en un principio Al Sooni se dirigía a Yemen vía Dulles, pero en el último momento cambió su destino por la capital holandesa.
A pesar de que son dos los arrestados, las autoridades estadounidenses creen que ambos, pese a poseer nombres árabes, no tienen nada que ver entre ellos, ya que la investigación está centrada en Al Sooni. El otro detenido ha sido identificado como Hezem Abdullah Thabi al Murisi.
Los investigadores creen que los artefactos explosivos falsos estaban hechos de una forma muy tosca, ya que son un tipo de dispositivo que las medidas de seguridad pueden detectar fácilmente. De hecho, fueron detectadas en un vuelo previo al de Chicago-Amsterdam, que conectó la ciudad de Birmingham --situada en el estado sureño de Alabama-- con Chicago.
Debido a que se detectó que las bombas eran falsas, se permitió que siguieran a bordo de los aviones, aunque aún se desconoce por qué se permitió que Al Sooni viajara hasta Amsterdam.
