VIENA, 4 Sep. (EP/AP) -
Natascha Kampusch, que estuvo retenida durante ocho años y medio en un zulo bajo una casa por un hombre que se secuestró tras su escapada, ha accedido a aparecer por primera vez en público y lo hará en una entrevista televisada este miércoles, dando así la posibilidad a los austriacos de saber un poco más de su dramática historia, que ha conmocionado a todo el país.
El representante para la prensa de Kampusch, Dieter Ecker, señaló que la joven será entrevistada por la televisión pública ORF y la entrevista retransmitida el miércoles por la noche. Aunque Natascha, que ahora tiene 18 años, ha sido asediada por cientos de peticiones de entrevistas desde que se fugó el 23 de agosto, sólo ha concedido otras dos, una al diario de gran tirada 'Kronen Zeitung' y otra al semanario 'News', según Ecker, que precisó que aún no se han publicado.
Kampusch accedió a la entrevista televisiva "por expreso deseo para informar personalmente a la población", explicó Ecker, precisando que la entrevista se limitará a "su salud, su capacidad para razonar, sus perspectivas de futuro, su situación social y sobre todo, su vida tras toda la conmoción mediática".
Ecker dijo que Kampusch estará "protegida" de algún modo durante la entrevista televisiva para garantizar que no es reconocida por las calles. Esto sugiere que la población, que hasta ahora sólo ha visto fotos tomadas antes de su secuestro cuando tenía 10 años, tendrá que seguir esperando para conocer su aspecto actual.
ORF no ofreció "ni un solo céntimo" a cambio de la entrevista y no está claro si la revista o el diario pagarán, aunque Ecker dijo que Kampusch ha rechazado algunas ofertas lucrativas. "Toda decisión es correcta e incorrecta", afirmó.
Kampusch se encuentra en un lugar seguro y no revelado desde su liberación y ha estado ayudando a los investigadores a reunir detalles sobre su secuestro y cautiverio.
Entretanto, la escuela primaria donde estudiaba Natascha Kampusch cuando fue secuestrada hace ocho años fue custodiada hoy, al comienzo del año escolar, para evitar que los niños, maestros y padres fueran acosados por la prensa y curiosos.
A los padres se le pidió no responder a los reporteros, que lanzaban preguntas desde la acera. Los periodistas tienen prohibida la entrada al recinto, al que Kampusch se dirigía cuando fue secuestrada el 2 de marzo de 1998.
La joven estuvo secuestrada durante ocho años en un sótano en las afueras de la capital, hasta lograr escaparse el pasado 23 de agosto, lo que provocó el suicidio de su captor, Wolfgang Priklopil, un electricista austríaco de 44 años de edad.
En el marco del caso, que fue uno de los mayores misterios de la Policía austríaca, el Ministerio de Justicia ha dicho que planea endurecer las penas por secuestro. Si Priklopil no se hubiese suicidado, se habría enfrentado una pena máxima de una década en la cárcel.
