Las autoridades y las tribus de Anbar mantienen "continuas reuniones" para resolver la crisis en la provincia

Actualizado: sábado, 18 enero 2014 3:17

MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -

Las autoridades locales y las tribus de la provincia de Anbar mantienen "continuas reuniones" para tratar de suavizar sus diferencias y resolver la crisis desatada por la irrupción de los milicianos del Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL), vinculado a Al Qaeda, a comienzos de año, según el vicepresidente del consejo provincial, Falé al Issawi.

En declaraciones a la agencia estatal de noticias iraquí, NINA, Al Issawi ha confirmado que este viernes el consejo provincial y el gobernador de Anbar, Ahmad Jalaf al Dhiyabi, se han reunido con los líderes tribales y los ancianos.

La tensión en Anbar se centraliza aún en las ciudades de Faluya y Ramadi, la capital, donde las fuerzas de seguridad, en colaboración con parte de las tribus, tratan de recobrar por completo el control de ambas localidades, hace dos semanas, tomadas por los milicianos del ISIL.

Al Issawi ha sostenido que el propósito de estas reuniones es "conocer las demandas" de las tribus y trabajar en "avenir sus puntos de vista con el Gobierno central" para poner fin al conflicto y las manifestaciones violentas en Anbar.

Este movimiento persigue limar las divergencias de las tribus suníes que rechazan colaborar con el Gobierno del primer ministro chií, Nuri al Maliki, desde hace varios meses y que, en última instancia, desembocó en la tensa coyuntura actual ante un vacío de seguridad en la zona.

La discriminación hacia los suníes que ha impuesto la mayoría gobernante chií se extiende desde al ámbito político, donde están relegados a un segundo plano, hasta la justicia, donde, según la comunidad suní, no reciben un trato igualitario.

Las manifestaciones armadas en Anbar afloraron a raíz de la violenta detención de un diputado suní de la provincia que se saldó con varias víctimas mortales y con la represión de un campamento de protesta en Ramadi por dicho arresto.

No obstante, los enfrentamientos y protestas de la comunidad suní contra el Gobierno chií se remontan a la ola de levantamientos de 2011 conocidos como la 'Primavera Árabe'.