MADRID, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Camerún, Paul Biya, ha defendido este sábado la necesidad de "manejar firmeza y diálogo" para resolver la crisis en la que vive inmersa la parte anglófona del país, donde desde hace dos años las protestas reclamando una mayor representatividad de los ciudadanos de habla inglesa han degenerado en la proliferación de grupos separatistas a los que el Gobierno está reprimiendo con contundencia.
Biya se ha referido a la crisis en las regiones de Noroeste y Suroeste durante su primer acto de campaña de cara a las elecciones presidenciales que se celebrarán el próximo 7 de octubre y en las que el veterano dirigente, de 85 años y en el poder desde 1982, espera obtener su séptimo mandato.
El presidente ha elegido para ello la ciudad de Maroua, en el Extremo Norte, una región del país golpeada por la insurgencia del grupo terrorista Boko Haram. "Si he elegido venir en campaña a Maroua es para deciros lo que estimo a vuestra región y para expresar también mi compromiso a que goce de las grandes oportunidades que se ofrecen a nuestro país", ha señalado, según informa el diario local 'Journal du Cameroun'.
El mandatario se ha referido al impacto que Boko Haram ha tenido en la región, donde "ha destruido, saqueado y matado". Pero pese a ello, ha resaltado Biya, los habitantes de la zona han "resistido todo lo posible" y han apoyado a las fuerzas de seguridad y los comités de vigilancia frente a "invasor bárbaro". "Ahora que el enemigo está fuera de nuestras fronteras, debemos reconstruir", ha subrayado.
Biya ha sostenido que el país "ha superado las pruebas más duras" si bien ha reconocido que aún queda pendiente la situación en las regiones anglófonas, "mortales por los secesionistas". El presidente ha dicho que hay que dar a la población "todas las satisfacciones que tiene derecho a esperar" y que hay que "protegerlas contra los excesos de quienes se dicen libertadores".
"Demostraremos que su futuro se encuentra en el seno de nuestra república", ha asegurado, en referencia a la aspiración independentista de los separatistas, que incluso llegaron a proclamar la independencia el 1 de octubre de 2017. "Necesitaremos permanecer unidos y solidarios, manejar al mismo tiempo la firmeza y el diálogo", ha añadido.
