LA PAZ, 26 Nov. (EP/AP) -
Una tercera persona murió hoy a raíz de las heridas recibidas en los disturbios que estallaron el fin de semana entre la población y la Policía en Sucre, donde estaba celebrando su sesión la Asamblea Constituyente que aprobó la nueva Constitución de Bolivia, que rechaza la oposición.
Fuentes médicas y la propia familia informaron de la muerte del universitario José Cardozo, herido de bala, que se suma a otros dos civiles muertos en los incidentes. Inicialmente se había informado de que también había muerto un policía linchado por una turba. Sin embargo, el comandante de la Policía, general Miguel Vásquez, precisó hoy que la versión es sólo "extraoficial" y que tiene referencias de un policía desaparecido, por cuya suerte manifestó su temor. La violencia del fin de semana, que dejó además unos cien heridos, se desató ante la decisión del oficialismo de organizar la sesión en unas depedencias militares de las afueras de Sucre, donde se encuentra la sede de la Asamblea. Esta aprobó su propio proyecto de Constitución, que incluye la reelección presidencial indefinida y la creación de 36 autonomías indígenas con gobierno y territorio propios, sin la presencia de la oposición.
El presidente boliviano, Evo Morales, y la Iglesia Católica pidieron la pacificación de Sucre, después de que la Policía abandonara ayer la ciudad y 103 presos huyeran de la prisión cuando el recinto fue atacado por la población. Las protestas se iniciaron por la petición de Sucre de que la Asamblea contemple el regreso a esa ciudad de los poderes Ejecutivo y Legislativo, en La Paz desde 1899, pero luego se centraron en el rechazo a la decisión del MAS de organizar la sesión en sede militar y aprobar su propia Constitución. Entretanto, en La Paz se anunció hoy la incorporación de Morales a una marcha de miles de cocaleros y otros sectores campesinos afines al MAS, que debe llegar en las próximas horas para exigir al Senado la aprobación de una renta para los mayores en nuevos términos. El mandatario no hizo declaraciones al sumarse a la caminata, a la altura de la ciudad de El Alto, 12 kilómetros al oeste de La Paz. Pero el principal dirigente de la marcha, Isaac Avalos, señaló a su inicio, hace una semana, que los campesinos querían el cierre del Senado, por estar controlado por la oposición.
CIERRE DEL SENADO
Contrariamente, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, informó hoy de que el Gobierno "de ninguna manera" busca clausurar el Senado, pero que esa cámara es "innoble" por poner obstáculos a los planes del Gobierno. En respuesta, el diputado de la opositora Podemos Fernando Messmer responsabilizó al Gobierno por lo que vaya a pasar con los diputados opositores en las próximas horas, cuando la marcha llegue al Congreso.
El Senado aprobó el viernes, con el voto de la oposición, un proyecto de ley que, en vez de quitar recursos a las prefecturas (gobernaciones) para pagar la renta como quería el Gobierno, toma fondos del Ejecutivo para cumplir con ese cometido, propuesto por Morales.
En Santa Cruz, bastión de la oposición al Gobierno, grupos de activistas tomaron la oficina de Impuestos Internos exigiendo la autonomía de ese departamento, el más rico de Bolivia.
