BOGOTÁ, 13 Ago. (Reuters/EP) -
El bombeo de petróleo en el Oleoducto Bicentenario, uno de los más importantes de Colombia, ha quedado suspendido debido al ataque perpetrado el pasado martes por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el municipio de Fortul, en el departamento de Arauca.
El ataque se produjo a las 2.30 (hora local) cuando guerrilleros de las FARC activaron un artefacto explosivo a escasa distancia del casco urbano de Fortul coincidiendo con un desplazamiento de tropas desde el municipio de Saravena.
Como consecuencia de ello, ocho militares resultaron heridos y se produjo una rotura en un tramos del oleoducto, dando lugar a un derrame de crudo y a un incendio de grandes proporciones, según ha informado la empresa que opera la infraestructura.
El oleoducto, de 230 kilómetros de longitud, puede transportar 110.000 barriles por día desde los campos de los llanos orientales hasta el oleoducto de Caño Limón-Coveñas, con el que se conecta.
La tubería atraviesa una conflictiva región con fuerte presencia de las FARC y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que suelen atacar contra las infraestructuras de hidrocarburos para denunciar la explotación de los recursos naturales.
