TUZLA (BOSNIA-HERZEGOVINA), 23 Nov. (EP/AP) -
Un equipo de expertos forenses ha finalizado la exhumación de más de 600 cadáveres de musulmanes bosnios que fueron matados por el Ejército serbio en Srebrenica y que estaban enterrados en una fosa común en el este de Bosnia, según informaron hoy fuentes oficiales.
Se trata de la novena fosa común que se descubre en la localidad de Kamenica. En este caso, de los restos de un total de 616 cuerpos, sólo 76 fueron hallados intactos, según afirmó la fiscal Fatima Hadzibeganovic, de la ciudad de Tuzla, de donde procede el equipo forense.
Los médicos han estado durante un mes trabajando en la fosa antes de exhumar los restos, cuyo ADN tendrán que analizar para identificar a quiénes corresponden, una labor que les llevará varios años. De momento, se sabe que los cadáveres fueron trasladados desde otro lugar en el que estaban previamente enterrados con el fin de ocultar el crimen.
Los expertos denominan estas tumbas "fosas comunes secundarias" y el trabajo en ellas es especialmente difícil debido a que se usaron grandes máquinas, como máquinas excavadoras, para mover los cadáveres de una fosa a otra. Además, a veces se encuentran partes de un mismo cuerpo en distintos hoyos.
Hadzibeganovic destacó que en la última fosa analizada en Kamenica se hallaron también varias balas y los muertos tenían los brazos atados y los ojos vendados. Además, la documentación que llevaban consigo indicaba que murieron en la masacra de Srebrenica, la mayor matanza masiva ocurrida en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
