Bruselas pide a los países "plena colaboración" en las investigaciones sobre vuelos tras el anuncio de Bush


BRUSELAS/ESTRASBURGO, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea pidió hoy de nuevo a los Estados miembros su "plena colaboración" en las investigaciones sobre las cárceles secretas de la CIA que están llevando a cabo el Consejo de Europa y la Eurocámara después de que el presidente estadounidense, George W. Bush, haya reconocido por primera vez su existencia. Mientras, el eurodiputado socialista italiano y ponente del informe sobre las actividades de la CIA que investiga el Parlamento Europeo, Claudio Fava, declaró que, "si fuera posible", invitaría a Bush a comparecer ante la Eurocámara para que informe sobre este tipo de prisiones.

"La posición del vicepresidente (Franco) Frattini es de pedir la plena colaboración de los Estados miembros, tanto con el Parlamento como con el Consejo de Europa", dijo su portavoz, Friso Roscam, que recordó que las dos instituciones se han quejado de que hasta ahora la cooperación de los Gobiernos "no ha sido suficiente".

Respecto a la posibilidad de que algún país de la UE o candidato vaya a ser sancionado por albergar estas prisiones secretas --en concreto Polonia y Rumanía, países que han sido mencionados por las organizaciones humanitarias-- el portavoz indicó que, de momento, no se puede "condenar a nadie" porque "el presidente Bush reconoció la existencia de prisiones secretas pero no especificó dónde están", y hay que esperar a que haya pruebas.

El portavoz del Ministerio polaco de Exteriores, Andrzej Sados, desmintió hoy, por enésima vez, que su país nunca ha albergado prisiones de la CIA. Mientras, las autoridades de un puerto del Mar Negro, acusado de haber acogido un centro de la Inteligencia estadounidense, aseguró que no había ninguna prueba de que haya existido. "Si el señor Bush reconoce la existencia de prisiones secretas, debería venir y mostrarnos dónde están", dijo el director del aeropuerto de Constanta, Corneliu Balan.

El presidente norteamericano admitió ayer que hay centros de detención de la CIA fuera del territorio de Estados Unidos, pero no quiso revelar su ubicación, como tampoco los métodos empleados para interrogar a los sospechosos de terrorismo encerrados en ellos.

"Si fuera posible, invitaría al presidente George W. Bush a comparecer ante la comisión, dado que ahora es nuestro mejor testigo sobre la existencia de las prisiones secretas de la CIA", señala el eurodiputado Fava en un comunicado.

A su juicio, llegados a este punto ya no debemos preguntarnos "si existen centros de detención clandestinos" sino, más bien, "en qué países y con la complicidad de qué gobiernos se crearon esas prisiones, cuántos prisioneros se llevaron y, sobre todo, qué pasó con ellos".

Fava recuerda, por último, que las comparecencias que tendrán lugar en los próximos meses y las misiones previstas por la comisión parlamentaria a Reino Unido, Polonia y Rumanía ofrecen una "ocasión perfecta" para "averiguar la verdad sobre los excesos y las violaciones que se produjeron, incluso en Europa, bajo el pretexto de la amenaza terrorista".

CONSEJO DE EUROPA

Mientras, el secretario general del Consejo de Europa, Terry Davis, hizo públicas hoy sus propuestas a los Gobierno europeos para "reforzar" la protección de los Derechos Humanos en el Viejo Continente y "remediar las carencias en su investigación sobre los vuelos" de la CIA.

Entre las medidas propuestas figura "la puesta a punto de normas mínimas para prevenir los atentados a los Derechos Humanos por parte de los servicios de seguridad, en particular de los servicios de seguridad extranjeros aliados activos sobre el territorio de un Estado miembro del Consejo de Europa".

Asimismo, se refirió a los "mecanismos de ejecución de las obligaciones en vigor en materia de Derechos Humanos respecto a los aviones en tránsito y un instrumento jurídico que permita el levantamiento de la inmunidad diplomática en caso de violaciones graves de Derechos Humanos".

Dichas propuestas fueron enviadas el pasado 4 de julio a los gobiernos de los 46 Estados miembros del Consejo de Europa, pero se habían mantenido en secreto hasta la reunión ayer del Comité de ministros de este organismo paneuropeo.

"El reconocimiento de la existencia de prisiones secretas de la CIA hace aún más urgente la prevención de esas violaciones de los Derechos Humanos en el futuro. Las prisiones secretas no son solo inicuas, sino también contraproducentes. La lucha contra el terrorismo sólo será eficaz si es justa y firme", declaró Davis.

Al respecto, el presidente de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE), René van der Linden, afirmó hoy que el secuestro y tortura de personas en centros secretos "es propio de criminales, no de Gobiernos democráticos".

El anuncio de Bush "confirma las exhaustivas investigaciones llevadas a cabo por el Consejo de Europa en los últimos meses", afirmó Van der Linden en un comunicado. "Aquellos que dudaron sobre nuestro relator Marty y recibieron con desdén su informe han comprobado que se equivocaban", prosiguió, en referencia al ex fiscal y senador suizo Dick Marty, encargado de investigar en nombre del Consejo las presuntas actividades ilegales de la CIA en Europa.

OTRAS REACCIONES INTERNACIONALES

Las reacciones de la comunidad internacional al anuncio de Bush han sido muy numerosas a lo largo del día de hoy. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el secretario general de la ONU, Kofi Annan, insistieron en la necesidad de respetar el Estado de Derecho en la lucha contra el terrorismo.

El Gobierno chino también criticó a Estados Unidos por su doble moralidad. "China aboga por que los esfuerzos antiterroristas deberían observar la Carta de la ONU y las normas básicas que rigen las relaciones internacionales", dijo el portavoz de Asuntos Exteriores chino, Qin Gang.

El mandatario estadounidense recibió críticas incluso dentro de su propio país. El senador demócrata Robert Menéndez señaló que lo que se necesita es un "cambio de rumbo" político, en lugar de "maquillar" la realidad.

Sin embargo, las declaraciones de Bush cosecharon alguna alabanza. El ministro australiano de Exteriores, Alexander Downer, afirmó que las centros de la CIA han conseguido importantes objetivos en la lucha contra el terrorismo. Según Downer, Australia se ha beneficiado directamente del programa, en referencia a las detenciones de Jalid Seij Mohammed, enlace entre la red Al Qaeda y el grupo terrorista del sureste asiático Jemaah Islamiyah, y del jefe de operaciones de esta organización, el indonesio Riduan Isamudin.