LONDRES, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Palacio de Buckingham ha negado la entrada a una fiesta que iba a celebrarse en sus jardines al líder del Partido Nacionalista Británico (BNP), Nick Griffin, debido a que utilizó "abiertamente" su invitación a la misma para propósitos políticos.
Un portavoz afirmó que su comportamiento había "aumentado la amenaza de seguridad y posibles molestias" a otros invitados. Pero Griffin aseguró a la BBC que la prohibición es un "escándalo absoluto". Todos los eurodiputados británicos están invitados al acto. Al parecer, otro eurodiputado del BNP, Andrew Brons, y la mujer de Griffin sí podrían asistir.
Antes de que la prohibición se impusiera sobre Griffin, éste describió la invitación en la página web del partido como "un paso adelante altamente simbólico" para la formación, el principal partido británico de extrema derecha.
Sin embargo, el Palacio de Buckingham afirmó en un comunicado que "el eurodiputado Nick Griffin no podrá entrar a la fiesta de este jueves en el jardín de palacio debido al hecho de que ha utilizado abiertamente su invitación personal para un propósito de su partido político a través de los medios de comunicación", en referencia a que Griffin ha aparecido en una televisión hablando de la invitación.
"Esto, a su vez, ha incrementado la amenaza de seguridad y las posibles molestias al resto de invitados que asistirán", añadió el comunicado. Se espera que a la fiesta ofrecida por la Reina Isabel II asistan unas 8.000 personas y que también esté el Duque de Edimburgo.
"La invitación personal de Griffin fue expedida para él como miembro elegido del Parlamento Europeo. La decisión de negarle la entrada no pretende mostrar ninguna falta de respeto al proceso democrático por el cual fue expedida dicha invitación. Aplicaríamos las mismas reglas a cualquiera que intentara politizar de manera descarada su asistencia", prosiguió el comunicado.
Griffin aseguró que aún no ha recibido una notificación oficial de que la invitación haya sido retirada e indicó que cree que se le ha prohibido la entrada por dar entrevistas en televisión sobre la visita. "Es un escándalo absoluto. Represento a millones de votantes. Parece que es una regla inventada para mí", aseguró.
Griffin también manifestó que, si a los representantes electos se les prohíbe las funciones estatales debido a las protestas, entonces la democracia británica está "sobre arenas movedizas".
En un correo electrónico enviado ayer a sus seguidores, Griffin detallaba que asistiría a esta fiesta como el representante de "un millón de patriotas británicos que votaron por este partido". "Este acto muestra lo lejos a lo que ha llegado este partido en los últimos años, pero no estaré en Palacio por mí mismo o por mi familia. Estaré allí para representar a los patriotas que lo hicieron posible. Estaré allí por vosotros", añadía el correo.
