Bush aboga por ayudar a los iraquíes a crear un "Gobierno libre" para que Irak deje de ser refugio de terroristas

Actualizado: sábado, 11 marzo 2006 18:50


NUEVA YORK, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

El presidente estadounidense, George W. Bush, defendió hoy la actuación de Estados Unidos en Irak y subrayó que pese a que tras la caída de Sadam Husein el país se ha convertido en el "frente central de la guerra contra el terror", las fuerzas de seguridad iraquíes están haciendo una buena labor, aunque hay que seguir ayudando al pueblo iraquí "a construir un Gobierno libre y representativo".

En su tradicional discurso de radio semanal, Bush admitió que "la situación en Irak sigue tensa", pero "el pueblo iraquí ha dejado muy claro que no permitirá que una minoría violenta les arrebate ese futuro desgarrando al país, y las fuerzas de seguridad han mostrado que son capaces de sobreponerse a divisiones sectarias para proteger la unidad de un Irak libre".

En este sentido, destacó los "grandes logros" de las fuerzas de seguridad iraquíes en el último año y su labor tras el atentado del pasado 22 de febrero contra una mezquita chií en Samarra que desencadenó una ola de violencia sectaria. Según el presidente estadounidense, las fuerzas iraquíes "se movilizaron rápida y eficazmente para proteger sitios religiosos, hacer respetar un toque de queda, y reestablecer el orden civil donde era necesario". "Los felicitamos por su buena labor", afirmó.

Esto demuestra, según Bush, "que nuestros esfuerzos para fortalecer y entrenar a esas fuerzas están dando resultado", por ello se seguirá con este entrenamiento. "Nuestra meta es que los iraquíes controlen más territorio que las fuerzas de Coalición antes de finales de este año", indicó el presidente estadounidense, precisando que con ello "se libera a las fuerzas estadounidenses y de la coalición para que se concentren en perseguir a objetivos de gran valor como el terrorista (Abú Musab al) Zarqaui y sus asociados".

"Los últimos tres años han sido una prueba de nuestra determinación", aseveró Bush, admitiendo que "la lucha ha sido dura" ya que el enemigo ha mostrado ser "brutal e implacable". En este sentido, dijo "entender" que "en medio de las noticias diarias de coches bomba, secuestros y asesinatos brutales", los estadounidenses "se preguntan ahora si la misión entera valió la pena".

"Yo creo firmemente que nuestro país está mejor sin Sadam Husein en el poder" ya que bajo su régimen "Irak era un enemigo de Estados Unidos". Sin embargo, "después de la liberación del pueblo iraquí, Al Qaeda y sus afiliados han convertido a Irak en el frente central de la guerra contra el terror".

Por ello, según Bush, "ayudando al pueblo iraquí a construir un Gobierno libre y representativo, negaremos a los terroristas un refugio donde puedan planear ataques contra Estados Unidos". "La seguridad de nuestro país está directamente ligada a la libertad del pueblo iraquí", añadió, subrayando que "esto exigirá más días difíciles de lucha y sacrificio".

"Sin embargo, confío en que nuestra estrategia llevará a la victoria, y que entonces nuestras tropas podrán regresar con el honor que habrán merecido", afirmó.

Bush precisó que con motivo de la celebración este mes del tercer aniversario del inicio de la guerra en Irak se dispone a dar una serie de discursos para informar "sobre nuestra estrategia para lograr la victoria en Irak" y sobre "los progresos que hemos estado logrando, las lecciones que hemos aprendido de nuestras experiencias.

y cómo estamos arreglando lo que no ha funcionado".