WASHINGTON, 2 Sep. (Reuters/EP) -
El presidente estadounidense, George W. Bush, dijo hoy que todavía es pronto para calcular los efectos del huracán 'Gustav' en la actividad energética del Golfo de México, pero consideró que hay algunos "signos alentadores".
"Ahora estamos en el proceso de evaluar los daños causados a las infraestructuras", dijo Bush a los periodistas antes de ser informado en la Casa Blanca de las repercusiones de la tormenta que tocó tierra ayer en Luisiana.
"Es un poco pronto ahora para hacer evaluaciones consistentes", apuntó Bush, aunque añadió que "hay algunos signos alentadores". El petróleo estadounidense cayó aproximadamente un 6'2 por ciento hasta 108'30 dólares el barril esta mañana.
Bush se refirió a las plataformas del Golfo de México que fueron desplazadas por el huracán 'Katrina' hace tres años, lo que provocó desperfectos en los oleoductos, afectando a la actividad en la zona.
"No hemos visto mucho de eso esta vez, aunque les diré que es un poco pronto para estar haciendo previsiones", trasladó Bush a la prensa.
Bush aprovechó la oportunidad para presionar una vez más a los parlamentarios para que cuando regresen de las vacaciones de verano autoricen más perforaciones submarinas para poder producir más crudo, y reducir así la dependencia extranjera.
"Esta tormenta no debe hacer que los miembros del Congreso digan: 'Bien, no necesitamos tratar nuestra independencia energética'", recalcó Bush.
"Esto debería hacer que el Congreso intensificase su necesidad de tratar nuestra dependencia del petróleo extranjero, y un lugar para hacerlo es darnos la oportunidad de explorar de forma ambientalmente amistosa caminos en la plataforma continental exterior", agregó.
