Bush llama a varios soldados de servicio en el extranjero antes de disfrutar su último pavo navideño en Camp David

Actualizado: jueves, 25 diciembre 2008 19:12


NUEVA YORK, 25 Dic. (EUROPA PRESS/Emilio López Romero) -

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, pasa a esta hora junto a toda su familia sus últimas fiestas de Navidad en la residencia de descanso de Camp David, a las afueras de Washington, semanas antes de que el próximo 20 de enero entregue el mando al mandatario electo, Barack Obama.

George y Laura Bush están acompañados de sus dos hijas gemelas, Barbara y Jenna, así como por los padres del todavía mandatario, el también ex presidente George Bush y su esposa Barbara, además de otros familiares cercanos, según informó la Casa Blanca.

El último menú de Navidad de los Bush será un tradicional pavo asado con patatas dulces y puré de manzana acompañado de una salsa de fresas, nada ligero teniendo en cuenta que anoche degustaron una cena muy mexicana con enchiladas, tamales, arroz y guacamole.

El presidente dedicó las primeras horas de la mañana a realizar llamadas de teléfono para hablar personalmente con algunos de los soldados estadounidenses que se encuentran de servicio en distintas partes del mundo.

Bush aprovechó esas llamadas para desear a cada soldado una Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo y para agradecerles los servicios que están prestando a la Nación, según informó la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino.

Tres de los miembros de las Fuerzas Armadas con los que habló Bush se encuentran desplegados en distintos puntos de Afganistán, otros tres en Irak, uno en Qatar y otro en la base naval que tiene Estados Unidos en el Golfo de Arabia.

Camp David es una de las residencias oficiales de descanso de los presidentes de Estados Unidos que fue construida en los años cuarenta por Franklin Delano Roosevelt. Está en el estado de Maryland, al norte de Washington, y ha sido el escenario de muchos acontecimientos históricos.