LONDRES, 18 Ago. (Reuters/EP) -
Reino Unido no desplegará tropas en Irak para intervenir en la crisis en curso en este país, ha señalado este lunes el primer ministro británico, David Cameron, después de que el ministro de Defensa, Michael Fallon, haya reconocido que el papel de Londres ya no es solo "humanitario".
Reino Unido se ha limitado hasta ahora a envíos de ayuda por aire, vigilancia y un acuerdo para transportar más suministros militares a las fuerzas regionales kurdas, aliadas con el Gobierno central de Bagdad en la lucha contra los insurgentes islamistas en el norte del país.
Además, el agregado comercial de Londres en Irak ha señalado que las SAS, las fuerzas especiales, están recabando información de Inteligencia.
"Reino Unido no va a implicarse en otra guerra en Irak. No vamos a desplegar tropas sobre el terreno. No vamos a enviar al Ejército británico", ha subrayado Cameron en declaraciones a la BBC.
Sus palabras se producen después de que Fallon haya señalado en una entrevista publicada este lunes por 'The Times' que "ésta no es simplemente una misión humanitaria".
Advirtiendo de que la operación podría durar meses, Fallon ha indicado que aviones de combate Tornado de la RAF y un avión espía están sobrevolando Irak, más allá de la zona en la que se centra la crisis humanitaria en la región del Kurdistán, para recabar información sobre las fuerzas del Estado Islámico.
Tras defender este domingo que Reino Unido debería usar su potencial militar para combatir al Estado Islámico e impedir que cree "un estado terrorista en las costas del Mediterráneo", Cameron ha tratado hoy de tranquilizar a los británicos sobre otra posible contienda.
En lugar de ello, empleará otros medios para ayudar a las fuerzas iraquíes y kurdas. "Deberíamos usar todos los medios que tenemos, nuestra diplomacia, nuestras relaciones políticas, nuestra ayuda, el potencial militar y la experiencia que tenemos, para ayudar a los demás", ha aseverado el 'premier'.
Las tropas británicas fueron un componente clave en la invasión encabezada por Estados Unidos en 2003 que permitió derrocar a Sadam Husein en Irak.
