MADRID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
Miles de centroamericanos avanzan en distintos grupos formando una gran caravana para la que Estados Unidos está blindando su frontera con México. Algunos encontraron ya problemas en la frontera de Guatemala con México, y desalentados por el largo camino y las dificultades que todavía les esperan han optado por pedir asilo o volver.
La primera caravana partió el pasado 13 de octubre de la ciudad hondureña de San Pedro Sula con 1.300 personas. Una semana después llegó a la linde entre Guatemala y México sumando miles. Desde entonces, han salido otras cuatro caravanas desde Honduras, Guatemala, El Salvador e incluso México.
"El fenómeno de la caravana en Centroamércia es otra expresión de un proceso migratorio al que la región se enfrenta desde hace tiempo", ha explicado el director regional de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) Marcelo Pisani en un comunicado.
"Es un flujo migratorio mixto" en lo que se refiere a las causas, ha comentado. Así, está motivado por la pobreza y la violencia que sufre el llamado Triángulo Norte --formado por El Salvador, Guatemala y Honduras--, pero también busca la reunificación familiar y protección internacional, ha señalado.
En el centro de asistencia al migrante Siglo XXI, en la ciudad mexicana de Tapachula, la OIM, en coordinación con las autoridades locales, ha proporcionado comida y kits de higiene a 1.500 migrantes a los que también ha asesorado sobre el proceso de asilo.
La tercera caravana, que partió el pasado domingo con 500 personas de El Salvador, llegó el martes a México y la mayoría pidieron asilo, ha indicado al OIM en un comunicado. En otros, "la fatiga y los desafíos han hecho que opten por el retorno voluntario ofrecido por las autoridades mexicanas y los oficiales consulares de Honduras".
El jefe de la misión de la OIM en México, Christopher Gascón, ha indicado que la agencia de la ONU, además de asistir a los migrantes de la caravana en su avance, "están proporcionando información sobre las alternativas para una migración regular y segura, así como la opción del retorno voluntario".
En los pasos fronterizos de Agua Caliente y Santa Rosa de Copán, en Honduras, la OIM repartió entre el 19 y el 24 de octubre 2.141 kits de higiene y comida a los retornados. Los migrantes hondureños están regresando a un tirmo de entre cuatro y seis autobuses diarios, mientras que otros lo hacen en aviones fletados por México, ha señalado la OIM.
"Estamos preocupados por el estrés y las demandas que las caravanas están poniendo sobre la comunidad humanitaria y sobre los sistemas de asilo de los países receptores, que tienen recursos limitados para hacer frente a este desafío y para cuidar y proteger como se debe a los migrantes", ha dicho Pisani.
