WASHINGTON, 16 May. (Reuters/EP) -
La Casa Blanca ha calificado la decisión de Pekín de colocar una plataforma petrolífera en las disputadas aguas del mar de China Meridional como un acto provocativo que eleva las tensiones en la región.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, en su habitual rueda de prensa, ha afirmado que "este acto provocativo" debilita el objetivo que comparten ambas potencias, "una resolución de paz de estas disputas y una estabilidad general en la región". Carney también ha manifestado la preocupación de Washington por "esta conducta peligrosa y la intimidación por los recursos controlados por el Gobierno (chino)en esta zona".
La plataforma petrolera instalada la semana pasada por las autoridades chinas ha levantado las críticas de Vietnam, que también reclama esas aguas como propias. Esta semana 21 personas han muerto en Vietnam durante las protestas contra las políticas del Gobierno chino.
Mientras tanto, el jefe del Estado Mayor chino, el general Fang Fenghui, de visita en Estados Unidos, ha culpado a Vietnam y ha asegurado que China no puede permitirse ceder "ni un milímetro". Además, China considera que no existe ningún problema con la plataforma ya que se encuentra en "aguas territoriales" chinas.
