SANTIAGO, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, aplaudió ayer la forma en que el país iberoamericano afronta la crisis económica internacional y el brote de nueva gripe, en un discurso televisado en que defendió la gestión de su Gobierno y la necesidad de seguir avanzando al ritmo actual en todos los niveles.
A su juicio, Chile "puede mirar al futuro con optimismo" y apostó por que 2010, año del Bicentenario de la independencia, "lo confirmará". "Son firmes los pilares de nuestra institucionalidad (...), son estables las bases de nuestra convivencia (...), son sólidos los cimientos de la economía, porque se afirman en un amplio consenso sobre la necesidad de interacción entre el mercado y el Estado", indicó Bachelet.
La presidenta chilena aseguró que "hablar del desarrollo supone un país más próspero, con un crecimiento sostenible y sustentable, pero también un país más integrado y más cohesionado". En este sentido, defendió ampliar las oportunidades para quienes "partieron con desventaja", al tiempo que citó programas como el sistema de pensiones solidarias, según informaciones de los medios locales.
Pese a la tasa de desempleo del 10,8 por ciento, Bachelet subrayó que Chile comienza a mostrar señales de recuperación. Así, apuntó que "el pulso de la economía se ha estabilizado y ya hay evidentes signos de recuperación, como se aprecia por ejemplo en las ventas del comercio".
"Todos los sectores han hecho su aporte. Necesitamos que la economía recupere plenamente su dinamismo y que se reduzca el desempleo", agregó la mandataria chilena.
