SANTIAGO, 21 Jul. (de la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -
Un bebé chileno se debate entre la vida y la muerte horas después de nacer en un hospital de Santiago, donde sufrió quemaduras en el 30 por ciento de su cuerpo debido a las altas temperaturas de una incubadora en la que fue ingresado en la clínica.
Los hechos ocurrieron el domingo en la Clínica Presbiteriana Madre e Hijo, donde Amaro Tolorza Díaz, que nació completamente sano a las 40 semanas de gestación, presentó un problema de "enfriamiento", por lo cual fue ingresado a una incubadora para nivelar su temperatura.
Sin embargo, por razones que se investigan, el aparato le causó graves quemaduras y fallos orgánicos múltiples que hoy lo mantienen conectado a un ventilador mecánico, sedado y bajo diálisis, tras varias intervenciones quirúrgicas en las que le aplicaron injertos.
Los padres trasladaron al bebé a otra clínica, Santa María, donde este lunes el subdirector médico, el doctor Cristián Ugarte, dijo que "el pronóstico del recién nacido es "bastante malo y delicado" y que las posibilidades de sobrevivir no superan el 10 por ciento.
