PEKÍN, 15 Jun. (Reuters/EP) -
El Gobierno chino ha avisado de que no tolerará intromisiones de ningún tipo en la crisis abierta en torno a una propuesta de ley de extradición de los delincuentes a China, suspendida este sábado tras el masivo ejercicio de presión popular demostrado esta semana ante la posible vulneración de los derechos de los detenidos por las autoridades de Pekín.
"Tomamos nota del anuncio", ha declarado el portavoz del Ministerio de Exteriores, Geng Shuang, quien ha avisado de que esta situacion es "competencia interna" de China y no admitirá injerencias de terceros países.
Asimismo, el portavoz ha asegurado que "los derechos y libertades de los hongkoneses que sean juzgados en China estarán plenamente garantizados" en virtud de la fórmula "un país, dos sistemas" que regula Hong Kong desde la devolución británica de 1997.
"Nuestra determinación para salvaguardar la soberanía y la seguridad de China, así como la prosperidad y la estabilidad de Hong Kong siguen siendo inamovibles", ha asegurado.
Durante su anuncio de la suspensión de los procedimientos, la jefa ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, ha asegurado que el politburó de Pekín le ha trasladado su "comprensión, confianza, respeto y apoyo" en esta decisión, de la que ha responsabilizado exclusivamente a su Ejecutivo.
