BEIJING, 1 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -
La compañía catalana La Fura dels Bauls estrenó hoy en la capital china su último espectáculo, 'Imperium', una crítica al "ojo por ojo" y a la cultura de la imposición del poder a través de la agresión en la que la oscuridad, el caos y violencia constante son sus principales características.
En el papel, la obra se estructura, a la manera de las tragedias griegas, en cinco actos (miedo, arengas, domesticación, conversión y muerte), y bebe, según sus autores, de obras como 'Las Bacantes' de Eurípides. En vivo, el mensaje de la obra, que comienza con una suerte de referencia al 11-S, llega de una forma bastante más confusa al espectador, que no obstante no puede evitar verse arrastrado (y por momentos, saturado), por la profusión de ruidos, luces, explosiones y escenarios móviles que lo invaden, le impiden quedarse quieto y lo convierten en un elemento más de un espectáculo estruendoso y lúgubre con ciertos toques sadomasoquistas (aunque sin desnudo final, eso sí, por el veto de las autoridades chinas).
"El público es el equivalente al coro griego, representa la conciencia global. Son críticos, y también expresan esta crítica a través del movimiento", declaró tras la presentación Jürgen Müller, director artístico de la Fura y codirector de la obra junto con Lluís Fusté.
Müller se mostró satisfecho con los resultados y no quiso hacer comentarios sobre el enfado de Fusté (al que se pudo ver durante el espectáculo enfurecido por ciertos fallos técnicos y estampando colérico su botella de agua contra el suelo). Pero sí matizó que el espectáculo actual no es más que un "embrión" que "a nivel de ritmos e intensidades tiene que mejorar".
"Todavía es pronto para saber qué diferencia hay entre la reacción del público chino y el europeo", explicó la actriz Lola López Luna, que trabaja con la Fura por primera vez. "Acabamos de presentarla y los días de estreno son siempre muy emocionantes, pero este espectáculo es de estar muy hacia fuera, no en un escenario, y la reacción que obtienes es inmediata. Estaban los espectadores que te ven y no se mueven y luego los que salen corriendo. Yo me he quedado con la cara de una chica china que se ha quedado como paralizada".
"Me he quedado maravillada", comentó una de las pocas espectadoras chinas presentes en el estreno, en el que las caras orientales brillaron por su ausencia. "Yo no sabía nada de esta compañía ni del espectáculo, he venido porque mi novio es catalán. Pero me ha encantado y lo he entendido perfectamente, aunque quizá a un ciudadano chino corriente le pueda parecer demasiado violento", declaró la joven, para quien el mensaje principal de la obra es que el poder somete a los humanos a una enorme presión y que "no importa quién lo tenga, porque el resultado siempre es el mismo".
'Imperium', en donde sólo intervienen, por primera vez en una obra de la Fura, mujeres (un total de ocho, salvo una breve aparición de un personaje masculino, tras la cainita destrucción final), se representará en Beijing hasta pasado mañana, día 3.
El espectáculo se enmarca dentro del festival 'Meet in Beijing', que tiene lugar en la capital china durante el mes del mayo y en el que España es este año invitado de honor. Junto con la Fura (traída a China por la Sociedad Estatal para la Acción Cultural Exterior, SEACEX), participarán en el festival el guitarrista Vicente Amigo, la pianista Rosa Torres-Pardo, el Teatro del Velador (con el espectáculo 'La Belle Cuisine'), la compañía Ertza de Asier Zabaleta, Rafael Amargo y el Ballet Nacional de España, encargado de clausurar el festival.
