China y Japón acuerdan seguir cooperando para acabar con la desconfianza mutua

Actualizado: miércoles, 7 mayo 2008 11:48


BEIJING, 7 May. (EUROPA PRESS/Débora Altit) -

La primera visita oficial del presidente chino, Hu Jintao, a Japón ha dado de momento pocos frutos, aunque ambos países se han mostrado comprometidos a aumentar la confianza mutua e intentar dejar a un lado sus diversas disputas.

De momento el líder chino, que aterrizó ayer en Tokio, ya ha recurrido a la socorrida "diplomacia del panda" a menudo utilizada por el gigante asiático y ya ha ofrecido a Japón dos osos pandas como gesto de buena voluntad, justo cuando el zoológico de Tokio acaba de perder, hace apenas una semana, a su querido panda Ling Ling.

El viaje de Hu, el primero de un jefe de Estado chino a Japón en diez años, y el segundo desde que los dos países entablaran relaciones diplomáticas, en 1972, va a estar lleno de gestos simbólicos: junto a la diplomacia del panda también está prevista una muestra de diplomacia del ping-pong, que tan buenos frutos le dio a la hora de establecer relaciones con EEUU en los años 70. En esta ocasión, está prevista la celebración de un partido entre Hu Jintao y el primer ministro nipón, Yasuo Fukuda.

Hu recibió hoy la bienvenida oficial del emperador Akihito y de Fukuda. En un comunicado conjunto, ambos países señalaron que la "cooperación para (lograr) la paz y la amista es la única opción para Japón y China". El comunicado insiste especialmente en que se seguirán manteniendo conversaciones sobre las disputas en torno a los pozos de gas del Mar de la China Oriental, el deseo de Japón de hacerse con un puesto permanente en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y otros puntos conflictivos.

Durante la rueda de prensa conjunta ofrecida por Fukuda y Hu, el líder chino aseguró que, con respecto a la explotación de gas submarina, "ya hay posibilidades de resolver este asunto.

Hu afirmó también que "ambos creemos que las relaciones entre China y Japón están viviendo un nuevo comienzo", mientras que el 'premier' nipón dijo que "tanto Japón como China necesitan construir un buen futuro para Asia y el mundo unidas, mediante el reconocimiento de su responsabilidad en la comunidad internacional, la profundización del entendimiento y la confianza mutua y el aumento de la cooperación".

Durante la rueda de prensa también salió a colación el tema de Tíbet, sobre el que la oposición japonesa pidió a Fukuda que presionara a Hu. El 'premier' japonés demandó a China que se continúe con el diálogo con el Dalai Lama, tras el breve encuentro mantenido la semana pasada entre China y representantes del líder tibetano en la ciudad de Shenzhen, cerca de Hong Kong.

Hu respondió, por su parte, pidiendo "sinceridad" al Dalai Lama y sus seguidores, y acusándoles de estar detrás de los acontecimientos del último mes e intentar arruinar los Juegos Olímpicos de este verano.

Las relaciones sino-japonesas viven uno de sus mejores momentos tras la salida del poder de ex primer ministro Junichiro Koizumi y el fin de sus frecuentes visitas al santuario Yasukuni (donde se honra a criminales de la Segunda Guerra Mundial), interpretadas como una provocación por China.

Justo coincidiendo con la visita Hu a Japón la prensa china se ha hecho eco hoy de una encuesta en la que se mide la actitud de los urbanitas chinos hacia Japón. El sondeo, que recoge "China Daily", fue elaborado entre algo más de 3.000 personas de las diez mayores ciudades del país en junio pasado (a pesar de que no se ha hecho público hasta ahora), y muestra la sintonía de la ciudadanía con el discurso conciliatorio defendido por Beijing.

Mientras que hace dos años los consultados, al igual que su Gobierno, recalcaban que no podía olvidarse el conflictivo pasado entre China y Japón, ahora la mayoría dice que de momento es mejor dejar los asuntos históricos de lado. Y la puntuación general para el vecino nipón ha pasado de los 1,84 puntos de 2006 (el máximo es 4 puntos) a los actuales 2,04.