BEIJING, 1 Ago. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -
El presidente chino, Hu Jintao, declaró hoy que las reformas puestas en marcha por su Gobierno no se detendrán con los Juegos Olímpicos, para cuyo inicio queda tan sólo una semana, y que el país tiene previstas nuevas medidas políticas y económicas.
En un encuentro celebrado hoy con un reducido grupo de periodistas extranjeros, Hu afirmó que su actual prioridad es mantener un crecimiento rápido y estable, conteniendo al tiempo la subida de los precios.
Hasta hace tan sólo un año el objetivo de Beijing había sido evitar el recalentamiento económico, pero en la primera mitad del año China creció un 10,4%, un punto y medio menos que en 2007, y el entorno de recesión mundial, y la subida generalizada del precio del combustible y las materias primas, hacen prever que el gigante asiático no podrán alcanzar los resultados de hace un año.
En la entrevista de hoy, Hu declaró que su Gobierno continuará "profundizando la reforma económica constantemente" para garantizar que los avances económicos y sociales se conviertan en un "legado espiritual" de los Juegos duradero. Para ello, afirmó que se aplicarán reformas "exhaustivas".
Hu, no obstante, repitió en su discurso una vez más la línea oficial de su Gobierno y demandó que no se politicen los Juegos. "No creo que politizar las Olimpiadas vaya a hacer ningún bien a la hora de manejar estos asuntos. Va contra el espíritu olímpico y también contra las aspiraciones compartidas de la aldea global", aseguró.
El líder chino, además, aseguró que se ofrecerá a los periodistas que acudan a China todas las facilidades para hacer su trabajo. Aunque, matizó Hu, "por supuesto, esperamos que los reporteros extranjeros respeten las leyes y regulaciones chinas. También esperamos que informen de forma objetiva sobre lo que ven".
"Al celebrar los Juegos de Beijing mostraremos al mundo que el pueblo chino es una nación que ama la paz", agregó.
