LONDRES, 4 May. (EUROPA PRESS) -
Las últimas estimaciones elevan a 243 las víctimas mortales al paso del ciclón 'Nargis' por Rangún, la antigua capital de Birmania, y las comunidades del delta del río Irrawaddy, donde al menos dos localidades han resultado prácticamente arrasadas por vientos de hasta 190 kilómetros por hora, según informó la cadena BBC, citando medios oficiales birmanos.
La Junta Militar birmana ya ha declarado el estado de emergencia en cinco regiones del país, entre ellas Rangún, zonas catastróficas, mientras el ciclón que llegó al país con fuerza de categoría 3 continúa su camino hacia Tailandia, aunque parece estar ya perdiendo intensidad.
Dentro del país, los servicios de emergencias ya han comenzado las tareas de rescate y desescombro en Irrawaddy, Bago, Karen, Mon y sobre todo en Rangún, que un día después del paso del ciclón permanece sin agua potable ni electricidad. Se desconoce por el momento el efecto de la tormenta sobre los barrios más desfavorecidos, situados en la periferia de la ciudad.
La oficial Junta de Electricidad se declaraba incapaz de estimar cuándo podrían reanudar los servicios mínimos en la principal ciudad del país. "Es imposible decir cuando podremos continuar con los suministros, porque todavía tenemos que limpiar este desastre", declaró un oficial de la Junta, bajo el anonimato. Por otro lado, un antiguo miembro de los servicios de emergencia birmanos mostraba su estupefacción ante la magnitud del desastre. "Nunca he visto nada igual", confesó, añadiendo que el escenario tras el paso del 'Nargis' "recordaba a cuando el (huracán) Katrina llegó a Estados Unidos", añadió.
Un diplomático con oficina en Rangún describía bajo condición de anonimato una perspectiva igual de desoladora a Reuters. "Total zona de guerra", dijo en un correo electrónico desde Bangkok. "Hay árboles tirados en todas las calles, postes eléctricos caídos. Hospitales devastados. Falta el agua limpia", agregó.
Peor es la situación en las ciudades del delta del río, contretamente Laputta y Kyaik Lat, donde el ciclón ha arrasado el 75 por ciento de las viviendas y arrancado el tejado de un 20 por ciento de las que aún se mantenían en pie, según la prensa oficial.
