MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha alertado de que los conflictos prolongados en Benghazi y en el oeste de Libia han desplazado a decenas de miles de personas en el interior del país, por lo que han tenido que tratar a más de 22.000 libios desde mediados de julio y enviar suministros de emergencia médica a más de 20 hospitales.
El organismo ha destacado el fuerte impacto que están teniendo los enfrentamientos en Benghazi sobre sus instalaciones médicas. "Los servicios en los principales hospitales se han visto gravemente afectados por las malas condiciones de seguridad, la salida de los trabajadores extranjeros y la escasez de suministros médicos", ha explicado el jefe de la delegación del CICR en Libia, Antoine Grand, que tiene su sede actualmente en Túnez.
Los enfrentamientos al sur y al oeste de Trípoli, en la parte occidental del país, y en Sabha y Ubari, en el sur, han dejado miles de desplazados. Una situación que también está afectando a la capacidad de respuesta de los principales hospitales y otros centros de atención de salud.
"Frecuentemente hay escasez en los suministros de combustible, electricidad y agua en las zonas afectadas por la violencia. Los precios de los alimentos básicos se han disparado y las infraestructuras han sufrido daños importantes", ha explicado Grand. Además, según el organismo, la situación de seguridad en algunas partes del país se ha deteriorado gravemente, por lo que es extremadamente difícil para las organizaciones humanitarias locales e internacionales llegar hasta las víctimas.
"Le recordamos a todas las partes en el conflicto que deben respetar a los profesionales sanitarios, las instalaciones y facilitar su trabajo", ha pedido Grand. El CICR cree que la falta de acceso seguro a la atención médica, a causa de la violencia, tendrá importantes consecuencias humanitarias.
El CICR presta apoyo a la Media Luna Roja Libia, la principal organización humanitaria que trabaja en el país. A través de su extensa red de 35 sucursales y más de 2.000 voluntarios activos, la Media Luna Roja de Libia ha sido la encargada de entregar la ayuda, pero también de la evacuación de los heridos y de los muertos y de la negociación para conseguir corredores humanitarios.
"A pesar de que nuestro personal internacional fue reubicado temporalmente en Túnez en julio, debido a la escalada de violencia en Trípoli, seguimos respondiendo a las necesidades. Intentamos hacerlo lo mejor posible en un ambiente de seguridad muy volátil a través de nuestro personal local y la Media Luna Roja Libia", ha dicho Grand. En total, el CICR tiene 140 trabajadores con sede en Trípoli, Benghazi, Misrata y Sabha.
