MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS) -
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha afirmado este jueves que está planeando la primera entrega aérea de ayuda humanitaria en las últimas dos décadas y el incremento a gran escala de sus operaciones para ayudar a la población de Sudán del Sur.
"Nuestro personal está evaluando las necesidades en el terreno y haciendo los preparativos necesarios para recoger los artículos lanzados desde aviones en lugares específicos. Junto con voluntarios de la Cruz Roja de Sudán del Sur y de la comunidad local, el personal se encargará de que la ayuda se distribuya en forma equitativa entre quienes más la necesitan", ha dicho Franz Rauchenstein, jefe de la delegación del CICR en Sudán del Sur.
"A fin de responder a esta difícil situación y de dar a la población la ayuda que necesita, nos estamos esforzando por incrementar nuestras actividades humanitarias", ha agregado el jefe de Actividades Operaciones del CICR en África Occidental, Eric Marclay.
El organismo ha destacado que la situación en el país es "grave" y ha alertado de que "corre el riesgo de deteriorarse aún más con la llegada de la temporada de lluvias".
Por ello, ha pedido a los donantes 48 millones de francos suizos (unos 39,3 millones de euros) adicionales para un total de 112 millones de francos suizos (cerca de 91,7 millones de euros), convirtiéndose en la segunda de mayor magnitud de aquellas que tiene en marcha, por detrás de la de Siria.
"Con los fondos adicionales, el CICR podrá abastecer de alimentos a 420.000 personas (en lugar de las 60.000 inicialmente previstas), y material de pesca, semillas y herramientas para más de 540.000 personas (en lugar de 200.000) y agua potable para 340.000 personas (en lugar de 250.000)", ha detallado.
"El CICR también mantendrá sus cuatro equipos de cirugía móviles en el país hasta fin de año y ampliará el apoyo a los hospitales (dos nuevas instalaciones, además de la que actualmente recibe ayuda)", ha agregado el organismo.
"Pese al gran esfuerzo de ayuda que ya se está realizando, las condiciones de vida de las personas desplazadas en Sudán del Sur siguen siendo preocupantes. Cientos de miles de personas viven en campamentos improvisados, y no pueden acceder a sus medios de sustento habituales", ha dicho Marclay.
"Muchas han perdido el ganado, otras no pueden retomar sus actividades agrícolas o de pesca. Carecen de refugio y de acceso confiable al agua potable. Debemos tomar más medidas en forma urgente e incrementar nuestro esfuerzo humanitario", ha destacado.
Por otra parte, Marclay ha mostrado la preocupación del CICR por las informaciones sobre ataques deliberados contra civiles e instalaciones médicas. "Por ello, recordamos permanentemente a las partes la obligación que tienen de respetar las normas del derecho internacional humanitario. En particular, los mandos deben imponer disciplina y asegurarse de que los servicios médicos sean debidamente respetados", ha remachado.
