JERUSALÉN, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
Miles de gazacíes han comenzado a concentrarse en la valla que separa la Franja de Gaza de Israel en el inicio de la conmemoración del aniversario de la Gran Marcha del Retorno, la protesta para exigir el retorno de los refugiados palestinos que comenzó el 30 de marzo de 2018, en el comienzo de uno de los episodios de violencia más largos que se recuerdan en el enclave.
La protesta de hoy, que podría reunir hasta un millón de personas, ha sido convocada por el movimiento islamista Hamás y será respondida por una movilización militar israelí casi sin precedentes en la valla de separación.
Los manifestantes se han concentrado en los cinco puntos habituales donde se han llevado a cabo las protestas en los últimos doce meses, mientras las mezquitas de la Franja lanzaron llamados a la población para que acuda a las marchas, que han comenzado a las 13.00 -- las 11.00 en España --
De momento, el Ministerio de Salud de Gaza ha confirmado la muerte este sábado de un joven palestino de 21 años ha muerto este sábado tras recibir un disparo de los soldados israelíes. Otras nueve personas han resultado heridas a lo largo de la noche del viernes, entre ellas un joven de 13 años con una herida grave en la cabeza por una bala de goma israelí.
El último balance de Naciones Unidas ha confirmado que, entre el 30 de marzo de 2018 y el 22 de marzo de 2019, 195 palestinos, incluidos 41 niños, murieron por los disparos efectuados por las fuerzas israelíes en las manifestaciones de la valla de separación entre Gaza e Israel. Otros 28.939 palestinos resultaron heridos, entre ellos un 25 por ciento por disparos israelíes. A ello hay que añadir otras 76 muertes de palestinos en ataques israelíes por aire y tierra.
Por la parte israelí, y de nuevo según cifras verificadas por la ONU, al menos un militar resultó muerto y otros seis fueron heridos durante las protestas, y otro militar falleció y otro medio centenar de israelíes (tres soldados y 47 civiles) resultaron heridos por la acción de grupos terroristas palestinos.
La violencia en la valla de Gaza ha acabado formando parte de la vida política y social de israelíes y palestinos hasta convertirse en una expresión del conflicto en la región a lo largo de doce meses especialmente tumultuosos para los dos extremos del conflicto: el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, investigado por corrupción y en plena campaña electoral, y el movimiento islamista Hamás, enzarzado con el Gobierno palestino en una batalla política por los salarios de los funcionarios y acuciados por las restricciones del Gobierno israelí.
