JARTUM, 19 Mar. (Reuters/EP) -
Cientos de personas han vuelto a salir a la calle este lunes en Jartum, la capital de Sudán, en el marco de una serie de manifestaciones contra el presidente del país, Omar al Bashir, que comenzaron hace ya tres meses.
Estudiantes, activistas y manifestantes frustrados con la situación económica que atraviesa el país, llevan protestando en diversos puntos de Sudán desde el pasado 19 de diciembre. Entre sus demandas se encuentra la dimisión de Bashir, que lleva tres décadas en el poder.
Durante las protestas de este lunes la Policía ha utilizado gas lacrimógeno para sofocar las marchas de estudiantes universitarios en la localidad de Jartum Norte. Al menos cuatro manifestantes han sido detenidos por las fuerzas de seguridad, tal y como han indicado varios testigos a la agencia de noticias Reuters.
Las autoridades han señalado que al menos 33 personas han muerto desde que comenzaron las protestas en diciembre, incluidos dos policías. Grupos de Derechos Humanos estiman en al menos 40 los fallecidos durante estas protestas, las más importantes desde que Al Bashir llegó al poder en un golpe de Estado en 1989.
Al Bashir ha responsabilizado de las protestas a "agentes" extranjeros y ha retado a sus rivales a tratar de llegar al poder a través de las urnas. Asimismo, ha advertido de que no permitirá ninguna Primavera Árabe, en alusión a la ola de protestas que sacudió Oriente Próximo y el norte de África en 2011.
Sobre Al Bashir pesa una orden de arresto del Tribunal Penal Internacional (TPI) por genocidio y crímenes contra la Humanidad por los presuntos abusos cometidos en la provincia de Darfur. Hasta ahora se ha librado del procesamiento al evitar su detención viajando sólo a países aliados.
