BOGOTÁ, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El senador Miguel De la Espriella reveló hoy que fue él quien sirvió de "contacto" entre los grupos paramilitares y el Gobierno, y aseguró que la presencia de algunos funcionarios y políticos en la reunión de Santa Fe de Ralito en el año 2001 con los jefes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) fue "accidental".
De la Espriella, que se encuentra detenido en la cárcel La Picota de Bogotá, se defendió de las acusaciones del ex jefe de las AUC Salvatore Mancuso, quien dijo que él es un paramilitar, pero reconoció que si colaboró con este grupo armado, transmitiéndole al Gobierno que los rebeldes querían iniciar un proceso de paz.
Según el ex parlamentario, el entonces candidato presidencial Álvaro Uribe le pidió que mantuviese "prudencia" por la petición formulada por las AUC y, posteriormente, le encargó del caso Luis Carlos Restrepo, quien actualmente es comisionado para la paz.
También confesó a la emisora 'La FM' que Mancuso le pidió que buscara a Gustavo Petro (uno de los más fuertes opositores al Gobierno de Uribe) "para tramitar un asilo político".
La reunión que sostuvieron algunas autoridades y políticos con los líderes de las AUC --como Mancuso y Carlos Castaño-- en Santa Fe de Ralito en el año 2001, fue revelada por De la Espriella en noviembre del año pasado lo que provocó que la justicia colombiana abriera un proceso en contra de 32 personas que estuvieron en el encuentro en el que se comprometieron a "refundar" el país. Actualmente, 13 congresistas están detenidos por este caso.
