MADRID, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Anticorrupción de Sierra Leona interrogó el lunes al expresidente Ernest Bai Koroma en una de sus "casas seguras", tras semanas de incertidumbre sobre su comparecencia y después de que uno de los intentos de acceder a él fuera impedido por decenas de seguidores que se concentraron frente a su vivienda.
El organismo ha detallado en un comunicado publicado en su página web que el interrogatorio "tiene relación con las investigaciones en torno a las acusaciones de corrupción mientras fue presidente del país, entre 2007 y 2018", antes de agregar que los procedimientos "continuarán en otra fecha" acordada por las partes.
"De esta forma, la comisión desea asegurar al público su determinación a la hora de llevar a cabo su mandato", ha resaltado. Bai Koroma está siendo interrogado por sospechas de casos de corrupción y blanqueo de dinero durante su mandato, si bien él ha rechazado todas las acusaciones contra él.
Las autoridades sierraleonesas emitieron a principios de octubre una prohibición de viaje contra el expresidente y varios exministros y antiguos funcionarios que trabajaron para su Gobierno por las acusaciones de corrupción que pesan sobre ellos.
En respuesta, Bai Koroma tildó de "ridícula caza de brujas" las acusaciones de corrupción contra él, que vinculó a una campaña desde el Gobierno. Así, denuncio "el incansable acoso del Gobierno" y resaltó que la situación "ha llegado a niveles indebidos e inaceptables".
Por su parte, el actual presidente de Sierra Leona, Julius Maada Bio, suspendió días después de empleo a todos los funcionarios mencionados en el sobre corrupción, incluidos el ministro de Agricultura, Dennis Vandi, y el secretario de la Vicepresidencia, Baba Fortune.
Bai Koroma accedió a la Presidencia sierraleonesa en 2007 y la abandonó en 2018, tras cumplir dos mandatos al frente del país africano, momento en el que cedió el poder a Maada Bio, vencedor en las elecciones presidenciales celebradas ese año.
El actual presidente ha defendido que la comisión de investigación creada en el país, encabezada por jueces extranjeros, ayudará al país a luchar contra la corrupción. "Tenemos que fijar un límite. No podemos ser así de corruptos como nación y esperar un desarrollo", dijo en septiembre en una entrevista concedida a la cadena de televisión británica BBC.
