MADRID, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
El jefe del Mando de Naciones Unidas (UNC) en Seúl, Walter Sharp, ha invitado al Ejército de Corea del Norte a iniciar unas conversaciones oficiales de alto nivel con el fin de aliviar las tensiones tras el ataque de Pyongyang a una isla surcoreana. Además, adelantó que abrirá una investigación para determinar el origen de las hostilidades.
"El UNC ha llamado al Ejército de Corea del Norte a comenzar unas conversaciones oficiales de alto nivel, a través de la Misión de Panmunjon, con el fin de iniciar un intercambio de información y rebajar la tensión", expresó Sharp mediante un comunicado divulgado este miércoles, en el que hace referencia a la localidad fronteriza en la que las dos Coreas suelen celebrar sus reuniones bilaterales.
En este sentido, el general, quien también dirige la actuación de los 28.000 militares estadounidenses desplegados en Corea del Sur, adelantó que el mando central abrirá una investigación para determinar el origen de este ataque, que según Pyongyang comenzó después de recibir disparos del Sur, aunque Seúl asegura que éstos procedían de unas prácticas de tiro y que el Norte fue el primero en abrir fuego.
"El UNC investigará el incidente como parte de su responsabilidad de mantener el acuerdo de armisticio y determinará las violaciones que se hayan cometido", recoge el documento en alusión a la misión de Naciones Unidas en la península coreana, cuyo objetivo es vigilar el cumplimiento de dicho pacto que puso fin a la acciones beligerantes de una guerra que, oficialmente, no se considera finalizada.
Además, Sharp aprovechó la ocasión para condenar el ataque contra la isla surcoreana de Yeonpyeong, habitada por unas 1.600 personas y ubicada cerca de la costa oeste de la península, en el que se han lanzado hasta medio centenar de obuses que han provocado la muerte a dos militares y herido a otras diez personas.
"Llamamos a Corea del Norte a poner fin a estos ataques no provocados (...) que amenazan la paz y la estabilidad de la región entera", apuntó Sharp, al tiempo que alabó el comportamiento del Ejército surcoreano, cuya rápida reacción "permitió salvar las vidas de los ciudadanos de la isla" al refugiarlos en búnqueres.
