SEÚL, 12 Oct. (EUROPA PRESS) -
El principal responsable surcoreano en las negociaciones con Corea del Norte sobre su programa nuclear, Kim Sook, indicó que le corresponde al régimen comunista llevar a buen puerto un nuevo acuerdo de verificación de sus actividades nucleares, que podría ser largo y difícil, un día después de que Estados Unidos aceptara eliminar a Pyongyang de su lista negra de gobiernos patrocinadores del terrorismo.
"En relación a las dificultades que nos esperan, todo depende completamente de la colaboración de Corea del Norte", declaró Kim a los medios en una rueda de prensa recogida por la agencia de noticias surcoreana, Yonhap. Los comentarios reflejan preocupación sobre el protocolo de verificación que servirá para confirmar la autenticidad de la declaración norcoreana sobre sus actividades nucleares, presentada el pasado mes de junio.
Bajo este compromiso y a cambio de su eliminación de la lista de países relacionados con actividades terroristas, Corea del Norte se compromete a permitir que los inspectores extranjeros puedan realizar investigaciones en las instalaciones que Pyongyang haya declarado previamente. En las no declaradas, cualquier tipo de inspección estará sujeta al consentimiento mutuo de Corea del Norte y de los países involucrados.
Este acuerdo, según Kim, restaura la normalidad en las conversaciones multilaterales entre Corea del Norte, su país vecino, Estados Unidos, Rusia, China y Japón. Estos cinco últimos países tomarán parte en el proceso de verificación con la ayuda de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA).
A la espera del reconocimiento oficial surcoreano de la eliminación de Corea del Norte de la "lista negra" estadounidense, fuentes oficiales bajo el anonimato explicaron a la agencia surcoreana "que la decisión norteamericana ha abierto el camino a la comunidad internacional para avanzar hasta la siguiente fase del proceso de desnuclearización norcoreano".
