La Conferencia de París pone el acento en el desarrollo del sector agrícola y energético
PARIS, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Conferencia Internacional de Apoyo a Afganistán celebrada hoy en París arropó política y económicamente la Estrategia Nacional de Desarrollo presentada por el presidente Hamid Karzai para los próximos cinco años y prometió 21.000 millones de dólares (unos 13.600 millones de euros), pero reclamó a Kabul más eficacia en su lucha contra la corrupción y transparencia en el gasto de la ayuda.
La cantidad anunciada con evidente alegría al término del encuentro por el ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, anfitrión de la cita, no es en su totalidad dinero "nuevo" porque en algunos casos se trata de fondos ya comprometidos.
No obstante, el representante afgano cifró en 19.000 millones de dólares (unos 12.300 millones de euros) el montante que no había sido previamente anunciado. Kouchner se felicitó de un éxito "que no se esperaba" y de la "generosidad" de las delegaciones. En todo caso, está por debajo de los 50.000 millones de dólares que el propio Karzai había calculado necesarios para llevar adelante el plan de desarrollo del país.
Karzai, que situó la seguridad como el "principal reto" que sigue teniendo ante sí el país, admitió que el proceso de desarrollo puesto en marcha está marcado por la confusión y las "estructuras paralelas" que minan el funcionamiento de las instituciones. "Afganistán necesita ayuda, pero la manera en que se gasta también es importante", dijo.
En este sentido, la Declaración sellada al final de los trabajos refleja el compromiso de los asistentes a coordinar su ayuda para hacerla más eficaz. A cambio, Kabul tiene que mejorar su sistema administrativo y mostrarse más combativa frente a la corrupción.
INSTITUCIONES Y ECONOMÍA
En el texto final fruto de la Conferencia de París, la comunidad internacional y el Gobierno afgano acuerdan dar prioridad al refuerzo de las instituciones y al crecimiento económico, en particular en los sectores de la agricultura y la energía.
Los asistentes se felicitan del balance de etapa pero admiten que persisten desafíos considerables, especialmente en el área de los derechos humanos, el respeto a la ley, las capacidades administrativas de desarrollo, el crecimiento del sector privdado y la seguridad de todos los afganos.
Entre los elementos "clave" que serán "esenciales" para la sguridad y la prosperidad del pueblo afgano, la Conferencia menciona el refuerzo de la democracia, estimular la inversión en infraestructuras, reforzar las instituciones y mejorar los servicios.
Se cree necesario igualmente mejorar la eficacia de la ayuda para que todos los afganos se beneficien del desarrollo del país y luchar contra la corrupción. En este sentido, el Gobierno afgano y la comunidad internacional realizarán, incluso de manera conjunta, auditorías de los programas financiados con cargo al presupuesto y se reforzará la capacidad del Gobierno afgano para mejorar el control financiero.
Intensificar la lucha contra la droga es otro de los aspectos que recoge la Declaración común, en la que se muestra la preocupación por la amenaza que suponen las redes de producción y tráfico de drogas para el desarrollo del país, especialmente en determinadas provincias.
Kabul se compromete en este terreno a tomar medidas eficaces para luchar contra la producción y el comercio de estupefacientes y la comunidad internacional a apoyar los programas alternativos al cultivo de droga.
El compromiso sellado en París recoge también la necesidad de garantizar una mayor participación de la sociedad civil en el proceso de reconstrucción del Estado, promover el respeto a los derechos humanos y reforzar la cooperación regional.
ESPAÑA APOYA EL DESARROLLO RURAL
La delegación española encabezada por el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, se comprometió a apoyar la estrategia sectorial de agricultura y desarrollo rural en Afganistán con 8 millones de euros destinados a crear una escuela de formación agrícola nacional en Kabul y otra provincial en Badghis.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, abrió la Conferencia anunciando que Francia doblará su ayuda al país, una cantidad que será de 107 millones de euros de aquí a 2010. "Tenemos el deber moral de ayudar al pueblo afgano", dijo Sarkozy tras resaltar que lo que está en juego es "la seguridad internacional y el futuro de un Islam de paz y tolerancia".
Mientras, la contribución más generosa la hizo la primera dama de Estados Unidos, Laura Bush, que confirmó una aportación de 10.200 millones de dólares. Londres prometió 760 millones de euros para el periodo 2012-2013 y Alemania 24 millones hasta 2010. El Banco Mundial destinará 1.100 millones de dólares (unos 713 millones de euros) en cinco años.
