Crónica Agua.- La ONU advierte de que la falta de agua creará graves problemas medioambientales en los próximos 15 años

Actualizado: martes, 21 marzo 2006 19:52

El informe GIWA señala que el consumo agrícola, que se prevé que siga aumentando, afecta al 70 por ciento del agua dulce

MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

La falta de agua desencadenará en los próximos 15 años una intensificación de los daños en el medio ambiente, en particular debido a la desertización de tierras cultivables, la debilidad del caudal de los ríos, la creciente salinidad de los estuarios, la pérdida de recursos pesqueros o especies de plantas acuáticas y la reducción de sedimentos en las costas, según un informe del Proyecto de Evaluación Mundial de Aguas Internacionales (GIWA) difundido hoy con motivo de la celebración, mañana, del Día Mundial del Agua.

Según el informe, elaborado por 1.500 expertos, la agricultura es la cuestión más preocupante en lo que se refiere a la falta de agua dulce, ya que de aquí a 2020 se prevé un incremento de la pérdida de tierras cultivables, de la inseguridad alimentaria y de los daños en las zonas pesqueras, con la consiguiente expansión de la malnutrición y las enfermedades.

"Se ha constatado en el mundo que la demanda de productos agrícolas está creciendo y que hay una mayor tendencia a productos agroalimentarios necesitados de un aporte considerable de agua, como la carne en lugar de las legumbres o los frutos en lugar de los cereales", señala el informe.

El consumo agrícola afecta al 70 por ciento del agua dulce del planeta, de la cual sólo un 30 por ciento es restituida a la naturaleza. La industria o los domicilios restituyen casi un 90 por ciento del agua utilizada.

INFRAESTRUCTURAS Y CONTAMINACIÓN

La falta de agua revela también la falta de conocimientos y de planificación por parte de numerosos países en vía de desarrollo que desconocen tanto las reservas disponibles de agua como las tendencias precisas de oferta y demanda de este bien natural. "Las lagunas más importantes conciernen a los acuíferos, lo cual constituye un obstáculo significativo para la gestión eficaz de los recursos de agua, dada la creciente dependencia de las capas freáticas", advierte el estudio.

Aparte, el informe denuncia prácticas como las subvenciones al uso de pesticidas o a la pesca, la superexplotación de las reservas pesqueras, los métodos destructivos de pesca o las ayudas financieras para la construcción de infraestructuras que no tienen en cuenta los "costes sociales y medioambientales".

Por ejemplo, la construcción de presas, la desviación de ríos, los trasvases de agua para garantizar el aprovisionamiento de agua y de energía pueden bloquear las emigraciones de los peces y reducir la explotación pesquera. Es lo que ocurre con las presas en el río Volga, que han reducido las emigraciones de esturiones a los Cárpatos.

Aparte, muchas de estas infraestructuras pueden ser ineficaces. Por ejemplo, más del 90 por ciento de las aguas del canal de la Eastern National Water Carrier de Namibia se pierden por efecto de la evaporación, advierte el estudio.

Otro problema es el de la contaminación de las aguas, principal problema detectado en una cuarta parte de las aguas de todo el mundo analizadas por los autores del estudio. Entre los agentes contaminantes, el informe menciona las materias en suspensión --en alza debido a las deforestaciones y a la agricultura--, los daños a los arrecifes coralinos o a las plantas marinas, el uso de fertilizantes agrícolas o los vertidos de desechos sólidos.

La contaminación por productos químicos afecta sobre todo a "puntos calientes" como América Central, África Occidental, Asia del Sur y Sureste, el río Jordán, el Mar de Aral o el Círculo Polar Ártico. Aparte, los vertidos de petróleo son particularmente graves en las Antillas, el río Níger y la corriente marina de Benguela, en África Suroccidental.

Para paliar todos estos problemas de infraestructuras y de contaminación, los expertos recomiendan la creación de un sistema de remuneración de los ecosistemas con el objetivo de revalorizar los bienes y los servicios producidos por elementos naturales que conviene preservar, como los arrecifes coralinos o los humedales.

Por ejemplo, los humedales de México serían menos vulnerables si se recompensara a sus propietarios por los servicios de depuración de las aguas usadas a través de estos filtros naturales contra la contaminación.

CAMBIO CLIMÁTICO Y PESCA

Otro factor analizado en el informe es la incidencia del cambio climático en las zonas de pesca y los organismos marinos. Según GIWA, la variación del clima es un factor determinante en el rendimiento pesquero de casi la mitad de los principales ecosistemas marinos del mundo.

Es el caso de los bancos pesqueros orientales y occidentales de Groenlandia, la corriente marina de Benguela, las costas suroccidentales de Africa, la corriente de Canarias o la corriente de Humboldt, en la costa oeste de América Latina. Se trata de regiones vulnerables en las que el cambio climático, según el informe, podría tener consecuencias graves.