El Gobierno moviliza al Ejército para socorrer a las víctimas mientras sigue recibiendo asistencia económica y material
BEIJING, 13 May. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades chinas cifraron hoy en más de 12.300 los muertos y en decenas de miles los heridos por el terremoto que sacudió ayer la provincia de Sichuan, en el suroeste del país; unas cifras a las que hay que añadir las miles de personas sepultadas que probablemente acabarán aumentando el balance de víctimas. El Gobierno ya ha movilizado al Ejército y otros efectivos para socorrer a las víctimas, mientras la comunidad internacional continua ofreciendo su ayuda al país asiático.
Según los datos del Gobierno chino, en la provincia de Sichuan, la más afectada por el temblor, han muerto 12.012 personas y 26.206 han resultado heridas, mientras que 9.404 continúan enterradas bajo los restos de los edificios. Asimismo, se cree que hay 7.841 personas desaparecidas, algunas de las cuales pueden estar sepultadas. En Sichuan se desconoce el paradero de un grupo de 19 turistas británicos que realizaban una ruta desde la ciudad de Chengdu hasta Wolong cuando la tierra tembló.
En total, en Sichuan hay que lamentar muertos en la Prefectura Autónoma tibetana-qiang de Aba y en las ciudades de Chengdu, Guangyuan, Mianyang y Deyang. Estas dos últimas son las más perjudicadas, con casi 7.400 y 2.650 fallecidos, respectivamente. Concretamente, en el Condado Autónomo qiang de Beichuan, situado en Mianyang, hay unos 5.000 muertos y se han derrumbado el 80 por ciento de los edificios.
Muy por detrás de Sichuan en cuanto a la cifra de muertos está la provincia de Gansu, donde son 206 personas las que han perdido la vida. Además, los heridos suman ya 2.179 y el número de evacuados asciende a 21.000. Las mayores pérdidas humanas se han producido en la ciudad de Longnan, donde han fallecido 173 personas y 2.027 han resultado heridas.
Asimismo, ha habido víctimas mortales en la provincia de Shaanxi, con 103 muertos, 893 heridos y nueve millones de evacuados. Aunque también han resultado afectadas por el seísmo, en otras zonas las consecuencias no han sido tan graves: en el municipio de Chongqing han perdido la vida once personas, y en las provincias de Yunnan, Henan y Hubei hay al menos un fallecido en cada una. Además, en Chongqing se han contabilizado 2,13 millones de damnificados.
Tras llegar al condado de Wenchuan (provincia de Sichuan), la zona del epicentro del seísmo, una brigada de soldados del Ejército pudo comprobar que al menos 3.000 de los 12.000 habitantes sobrevivieron al seísmo, según informó el Mando Militar del Área de Chengdu, la capital provincial. También se ha confirmado el fallecimiento de al menos 500 personas.
Según las fuentes citadas por la agencia estatal china, Xinhua, los soldados consiguieron esta tarde llegar a pie hasta la localidad de Yingxiu, donde vieron que más del 70 por ciento de las carreteras han quedado destruidas y casi todos los puentes se han venido abajo. El comandante del Área Militar de Chengdu, Li Shiming, indicó que los militares han distribuido alimentos y agua a los niños y heridos en esta localidad y que se está trasladando por aire más ayuda.
EL GOBIERNO CHINO ACTÚA
El Gobierno chino ha asignado hasta ahora 860 millones de yuanes (79,43 millones de euros) para financiar las labores de ayuda necesarias tras el fuerte terremoto. Además, casi 20.000 soldados han llegado ya a distintos puntos de Sichuan y otros 30.000 se dirigen hacia allí --en avión, tren, por carretera o a pie-- para auxiliar las víctimas del terremoto.
Asimismo, el primer ministro chino, Wen Jiabao, ordenó que se despejen las carreteras de acceso a las zonas afectadas, y el presidente, Hu Jintao, exhortó a los gobiernos de todos los niveles del país a considerar su contribución a las labores de asistencia como su máxima prioridad.
"Debemos sacar lo mejor de nosotros mismos para limpiar las carreteras que conducen a la zona del epicentro (del seísmo) y llegar hasta la gente atrapada en las zonas del desastre", recalcó el primer ministro.
También destacó la importancia de que se empiecen a lanzar con urgencia alimentos y medicamentos por vía aérea sobre las zonas afectadas debido a lo incierto de la situación en los condados de Wenchuan, Lixian y Maoxian, adonde los servicios de rescate no pueden llegar. "Las carreteras bloqueadas, la falta de comunicaciones y las continuas lluvias han supuesto obstáculos", lamentó Wen.
Por su parte, Hu, secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China (PCC), presidió la reunión del Comité Permanente de la Oficina Política del Comité Central del PCCH. En el encuentro se hizo un llamamiento al Ejército, la Policía y las fuerzas de milicia popular, así como al personal médico, para que se dirijan lo antes posible a las zonas afectadas por el terremoto y realicen todos los esfuerzos posibles para salvar a los heridos y reducir el impacto de la catástrofe.
En la reunión se pidió también que se proporcionen suficientes suministros alimentarios y médicos, ropas y tiendas de campaña y que se restablezcan las líneas de telecomunicaciones, el suministro de energía y de agua y se recompongan los sistemas de transporte.
Los trabajos de reparación realizados anoche permitieron abrir las vías de comunicación, que se utilizarán inicialmente para el transporte de ayuda humanitaria, con un primer envío de 50.000 tiendas de campaña, y de 1.300 trenes militares destinados a Sichuan y las regiones cercanas para realizar las operaciones rescate. En amplias zonas de la provincia suroriental se quedaron sin electricidad, ya que cinco centrales y seis subestaciones eléctricas quedaron afectadas tras el seísmo.
Pero las labores de reparación se están viendo dificultadas por las primeras réplicas del terremoto de 7,8 grados en la escala Richter, que ya han comenzado a notarse en Chengdu, la capital de Sichuan.
AYUDA
Hoy continuaron las muestras de solidaridad internacional hacia los damnificados por el seísmo, concretamente por parte de Japón, la Unión Europea, Estados Unidos, España, Malasia y Noruega, entre otros. Sin embargo, las autoridades chinas han manifestado su preferencia de recibir ayuda material en lugar de equipos de rescate.
El Gobierno nipón ofreció al país vecino ayuda de emergencia por valor de 500 millones de yenes (algo más de 3 millones de euros). Según dijo el ministro de Asuntos Exteriores japonés, Masahiko Komura, esta asistencia es una respuesta a la petición realizada por Beijing, y Tokio está dispuesto a enviar personal si fuera necesario.
Estados Unidos, por su parte, va a destinar 500.000 dólares a los esfuerzos de ayuda para atender a los afectados, una "contribución inicial" a la que, según la Casa Blanca, podrían sumarse otras "si fuera necesario".
También han querido aportar dinero las cuatro grandes entidades bancarias estatales chinas: el Banco Industrial y Comercial de China, el Banco de Construcción de China, el Banco de China y el Banco Agrícola de China. En conjunto, han donado 57 millones de yuanes (5,26 millones de euros) que se utilizarán en los trabajos de reconstrucción y de ayuda.
En total, el Gobierno chino dispone de donaciones públicas por valor de 221,67 millones de yuanes (20,47 millones de euros), tanto en dinero como en bienes, según datos del Ministerio de Asuntos Civiles.
