Crónica Clima.- Arranca la conferencia de la ONU contra la Desertificación con tres objetivos para la próxima década

Actualizado: lunes, 3 septiembre 2007 21:40

Ecologistas piden un mayor compromiso con la salud de 1.200 millones de personas afectadas por la desertificación

MADRID, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -

Hoy arrancó en Madrid la VIII Conferencia de las Partes de la Convención de Naciones Unidas de lucha contra la Desertificación (COP 8), conferencia que se desarrollará hasta el próximo 14 de septiembre y que cuenta con la participación de delegaciones de hasta 200 países. Según explicó la ministra de Medio Ambiente española, Cristina Narbona, hoy se han fijado tres objetivos claros para la próxima década: conseguir nuevas fuentes de financiación, el respaldo de la Unión Europea (UE) para sus proyectos y soluciones concretas para un problema que afecta a más de 1.000 millones de personas en el mundo.

El secretario ejecutivo en funciones de la convención de las Naciones Unidas de lucha contra la Desertificación, Gregorie de Kalbermatten, destacó durante su intervención que España ha tenido "un papel decisivo" en la lucha contra la desertificación, que ha sido líder internacional y nacional en esta tarea, con planes propios y muchas actividades "que demuestran su compromiso".

"Esperamos que España siga siendo un actor clave" de nuestra lucha", expresó, asegurando también que este es "un momento histórico" en el que la ONU "no debe dormirse en los laureles". "Todos somos conscientes de la magnitud de la tarea, pero estamos contentos por la orientación optimista que tenemos y nos ayuda a identificar objetivos. Estamos seguros que vamos en las direcciones adecuadas, sobre todo en lo que respecta a los más afectados", los países africanos, anotó.

La titular de Medio Ambiente española, Cristina Narbona, confesó que espera que esta reunión marque "un antes y un después" contra este efecto, en los 10 años de historia que tiene esta reunión, y que estos debates "aceleren" la consecución de resultados, pasar "del conocimiento satisfactorio a la acción" con políticas internacionales para prevenir y mitigar la desertificación con "instrumentos reforzados" y en colaboración con convenciones como las encargadas del cambio climático o la protección de la biodiversidad en el planeta.

Narbona recordó que entre las causas de la desertificación se encuentran actividades humanas como la agricultura, la urbanización, la deforestación o la contaminación ambiental. Destacó que los incendios "agravan" el proceso y que todos estos factores unidos, aumentan las dimensiones del proceso de calentamiento del globo. Además, puntualizó, se trata de un problema con una relevante dimensión humana, ya que la desertificación en muchos países del denominado Tercer Mundo genera la pobreza y las desigualdades por las que muchas personas se ven obligadas a emigrar.

"Acogemos a muchas personas que hoy son ciudadanos de pleno derecho en nuestro país. Debemos trabajar pensando en los afectados por la desertificación. Espero que el pensar sobre ese drama humano impulse a trabajar con eficacia y se pase del debate a la toma de posición", manifestó la ministra, subrayando también que no sólo los países con economías pobres son víctimas de este proceso de degradación de la tierra, también lo son lugares como España, donde una tercera parte del territorio está "seriamente afectado" por la sequía.

"Nos afecta a todos y los países más ricos tenemos más responsabilidad en la lucha contra la pobreza y desigualdad", recalcó Narbona, quien asegura que en esta batalla España ha tenido desde el principio un papel muy activo de compromiso con el Medio Ambiente y con los afectados por la desertificación, sobre todo en África.

En este sentido, según Narbona, las intervenciones del Gobierno están "cada vez más ligadas al desarrollo sostenible" de España con políticas renovadas que buscan ahora frenar el avance de la desertificación a través de un mayor control de la calidad y el gasto de agua para que se use "con más responsabilidad y eficacia", y con nuevas políticas agrícolas y prácticas para proteger la biodiversidad.

IMPLICAR A LA UE

La ministra confirmó que en la reunión informal que mantuvo este fin de semana en Lisboa con diversos ministros de la UE, propuso convertir el centro temático de recursos del suelo de Barcelona en el Centro Europeo para la Desertificación y la Sequía, una de las iniciativas con las que Narbona busca "implicar a la UE" en este combate. "No podemos permitir que el siglo XXI se convierta en el siglo de la desertificación y la responsabilidad es de cada uno", sentenció.

Por su parte, el Príncipe de Asturias aseguró que España acoge esta reunión con "gran interés y voluntad de compromiso" con la tarea de luchar contra la desertificación que está acabando con los recursos de los habitantes de muchas zonas áridas del plantea. Considera que este problema nos pone ante un escenario de futuro "preocupante" que necesita de "acciones urgentes y eficaces" que prevengan y palien la degradación del ecosistema.

Insistió en la importancia de acometer el conflicto "desde la dimensión humana y medioambiental" y aseguro que se trata de un "desafío ético" el lograr extender el "derecho" al agua, al aire limpio y a los alimentos no contaminados "a todos los habitantes de la tierra". Destacó el "importante papel" que juegan las comunidades locales en el control sostenible del agua y la tierra y animó a los participantes del encuentro a acometer la tarea "con plena entrega y renovada ilusión".

ECOLOGISTAS PIDEN UN MAYOR COMPROMISO

Por su parte, unos 50 representantes de las cerca de 70 organizaciones ecologistas de todo el mundo que participan como observadores en COP 8 han leído hoy a las puertas del madrileño Palacio de Congresos y Exposiciones de Paseo de la Castellana, donde se celebra el acto, un manifiesto en el que piden a los países más compromiso, más recursos y objetivos concretos "con plazos" para acabar con la "desilusión y frustración" que genera la actual pasividad de los actores de la lucha contra este dañino proceso.

En el documento, firmado por ONG españolas como Ecologistas en Acción, Fundación IPADE, Asamblea de Cooperación por la Paz, y WWF/Adena, reiteran "la necesidad de cumplir los compromisos adquiridos para dar un impulso" a las políticas en favor del desarrollo sostenible en las tierras secas del mundo.

"La Convención de Lucha contra la Desertificación camina hacia los 11 años de su entrada en vigor y en cada reunión se viene pidiendo pasar a la acción, sin embargo la negativa a comprometer recursos nuevos y adicionales sigue siendo una constante, amén del incumplimiento de los compromisos de las Partes y organismos de la Convención", reza el manifiesto.

Recordaron que "el escenario de degradación de los suelos" en el que vivimos hoy "afecta a la seguridad alimentaria, incrementa la pobreza, dispara las migraciones internacionales a gran escala, los conflictos intraregionales, la inestabilidad social, agudiza la inequidad de género y pone en riesgo la salud y el bienestar de 1.200 millones de personas en más de 100 países".

Aseguran que "en última instancia, los propios países desarrollados pagan un alto precio ambiental, económico y social del que son responsables" cuando aportan dinero a la causa. A su juicio, un "excelente ejemplo" de esto es Europa, que está experimentando "una severa degradación y pérdida del suelo fértil y además asiste a las consecuencias desestabilizadoras del mismo fenómeno que encontramos en todas partes: la migración forzosa".

Reconocen que les preocupa "profundamente" el "pobre nivel de compromiso" que muchos países han mostrado en el proceso pero dicen que necesitan "ser optimistas" sobre la posibilidad de que tras esta VIII Conferencia se abra "una nueva etapa" en la que "terminen las excusas" para cumplir los compromisos.