Uribe anuncia que "arreciará" la ofensiva contra la guerrilla y descarta la posibilidad de un intercambio de rehenes por prisioneros
BOGOTÁ/PARÍS, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
Ingrid Betancourt, quien fuera candidata a la Presidencia de Colombia para las elecciones de 2002, cumplirá mañana, viernes 23 de febrero, cinco años secuestrada por la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) sin que se prevea en un futuro próximo el acuerdo humanitario que habían planteado el Gobierno y el grupo armado.
A menos de 24 horas de que se cumpla el quinto aniversario de la captura de Betancourt, el presidente colombiano, Álvaro Uribe, explicó al diario francés 'Le Figaro', en una entrevista publicada hoy, que tiene información de que las FARC la han sacado del país, aunque aclaró que por ahora sólo son rumores y noticias sin confirmar.
Sin embargo, para la hermana de la ex candidata, Astrid Betancourt, en declaraciones a la televisión francesa, es posible que la guerrilla quiera "protegerla de operaciones militares", en referencia a la decisión del Gobierno de liberar a los secuestrados por la vía militar y nunca a través de un intercambio humanitario.
En este mismo sentido se refirió la madre de Ingrid, Yolanda Pulecio, quien remarcó que si la guerrilla ha sacado a su hija de Colombia, "será por el peligro tan grande de los operativos militares que no la quieren poner en peligro, y si es así, bendito sea Dios". No obstante, no otorgó mucha credibilidad a las palabras de Uribe, y dudó de que no sea una "cortina de humo para justificar el desinterés que ha habido para buscar una salida dialogada y rápida para la salida de ella".
De hecho, Uribe anunció hoy también que ha dado órdenes a las Fuerzas Armadas de "arreciar" la lucha contra la guerrilla, en referencia a las afirmaciones recientes del grupo armado, que volvió a asegurar que no habrá un acuerdo humanitario mientras Uribe siga al frente del Gobierno colombiano.
NUEVAS GESTIONES
El mandatario reveló que hace "días" autorizó a un ciudadano colombiano y a los gobiernos de tres países europeos --en referencia a España, Francia y Suiza-- hacer nuevas gestiones que permitan sentar las bases para un acuerdo humanitario.
"Esas autorizaciones las han venido ejerciendo, los tres países europeos siguen autorizados. Y ahora el Gobierno está a la espera de respuestas", afirmó el presidente, quien por otro lado reveló los contactos mantenidos por el representante del Ejecutivo con la cúpula de las FARC "en las selvas del sur de Colombia".
El presidente explicó que la persona autorizada, de la que no quiso revelar su nombre, se comunicó con las FARC para que hiciera gestiones tendientes a facilitar el acuerdo humanitario. "Él fue, en una buena expresión de buena voluntad del Gobierno y lo que trae es una amenaza de las FARC", afirmó Uribe indignado.
"Las FARC dicen que la única manera de hacer acuerdo humanitario es si el Gobierno libera, desmilitariza, incondicionalmente (los municipios de) Pradera y Florida y que ellos harían una verificación. Ustedes saben que el Gobierno no puede aceptar eso", añadió el presidente ante los periodistas.
Antes de viajar a San Vicente del Caguán, en el departamento de Caquetá, el mandatario recordó a las FARC que mientras la guerrilla apostó por todas las formas de lucha y les acusó de "engendrar" el paramilitarismo, el Gobierno lo que hace es "desmontar" a los grupos de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
MANIFIESTO EN FRANCIA
Los fuertes vínculos de Ingrid Betancourt con Francia, país en el que estudió y donde conoció a su marido, han propiciado la implicación del Gobierno francés durante su secuestro, abogando siempre por el canje. Precisamente hoy, la candidata presidencial socialista, Ségolène Royal, firmó un manifiesto, que fue dirigido a todos los candidatos a las elecciones de abril, en el que se compromete a "realizar todos los medios diplomáticos y legales para lograr" su liberación "sin excluir ninguna posibilidad y trabajar junto con los actores colombianos e internacionales".
Además, reafirma su rechazo "categórico a cualquier operación militar para liberar a Ingrid Betancourt, puesto que el riesgo de que sea ejecutada por las FARC es grande", de manera que aboga por "poner manos a la obra para privilegiar un acuerdo humanitario que permita el canje de los 57 rehenes de las FARC por los 500 guerrilleros encarcelados, solución más fiable para encontrarlos vivos".
Del mismo modo, reclama que la "movilización internacional no se limite a Francia, España y Suiza". "Me comprometo públicamente a movilizar todas las instancias de la Unión Europea y de Naciones Unidas; los países de América Latina y Estados Unidos, con el fin de hacer de la liberación de Ingrid Betancourt una prioridad internacional", señala el manifiesto.
Asimismo, propone celebrar una rueda de prensa una vez por trimestre para informar a los franceses "del avance de los trabajos en vistas de la liberación de Ingrid Betancourt", así como "trabajar por la creación de un Observatorio Internacional de toma de rehenes, bajo la dirección de la ONU, para trabajar por la liberación de los secuestrados en el mundo", y destaca que "el 80 por ciento de ellos se encuentran en Colombia".
INTERCAMBIO HUMANITARIO O RESCATE MILITAR
La ex candidata presidencial fue secuestrada junto a su jefa de campaña, Clara Rojas, el 23 de febrero de 2002, en plena campaña electoral, cuando pretendía acceder por tierra a una antigua zona despejada de 42.000 kilómetros cuadrados del sur del país, sede de los frustrados diálogos de paz del Gobierno con las FARC y escenario de fuertes operaciones militares.
Poco después de la captura de Betancourt, las FARC exigieron que para su liberación, el entonces gobierno de Andrés Pastrana debía poner en libertad a decenas de rebeldes presos, pretensión que fue inmediatamente rechazada por las autoridades. Sin embargo, formuló esta propuesta de nuevo al recién elegido Ejecutivo de Álvaro Uribe, aunque esta vez hablaron de más de 50 secuestrados a cambio de sus compañeros.
Desde la captura de Betancourt, la guerrilla siempre ha condicionado su liberación a un canje de prisioneros y en un principio dio un plazo de un año para firmar una ley de intercambio, ley que la Administración de Pastrana se negó a aceptar aludiendo que no había "condiciones equivalentes entre los dirigentes políticos" secuestrados y los guerrilleros que estaban en prisión.
Organizaciones de Derechos Humanos y el Gobierno francés, entre otros, han realizado gestiones humanitarias para lograr la liberación de la dirigente de 'Oxígeno Verde', e incluso en estas gestiones participó el presidente venezolano, Hugo Chávez, al que se pidió que facilitara conexiones con la guerrilla para poner fin al secuestro.
Si bien a lo largo de estos años tanto las FARC como el Gobierno han hecho siempre mención al canje humanitario aunque sin concretar nada --siempre con las gestiones de facilitación de España, Francia y Suiza, "gobiernos amigos" para la guerrilla--, toda posibilidad de acuerdo quedó cerrada en octubre de 2006, cuando el Ejecutivo de Uribe suspendió los contactos y ordenó el rescate por la vía militar de los secuestrados a raíz de un atentado en una escuela militar de Bogotá.
No obstante, esta decisión no fue bien recibida por la opinión pública colombiana ni por el Gobierno francés, que subrayó el pasado día 6 que es partidario "exclusivamente" de la vía pacífica y del acuerdo humanitario para conseguir la liberación de los secuestrados en poder de la guerrilla. París considera que esto es una "prioridad" y que "no hay solución militar" por los riesgos que podrían derivar del intento de liberar a los rehenes "por vías militares".
