Crónica EEUU.- Los candidatos de ambos partidos se juegan su futuro mañana en el 'Supermartes'

Actualizado: lunes, 4 febrero 2008 20:54

Los republicanos podrían dejar decidido quién será su candidato, mientras que no se espera que Obama o Clinton salgan ya vencedores

NUEVA YORK, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

Mañana será un día clave en las aspiraciones hacia la Casa Blanca de los candidatos que continúan en liza de los dos partidos, ya que están previstos caucus o primarias en un total de 24 estados, en 19 de los cuales se elegirán a los delegados tanto republicanos como democráticos. Mientras que del lado republicano John McCain podría dejar sentenciada su victoria, entre los demócratas la cada vez más exigua distancia entre Hillary Clinton y Barack Obama amenaza con alargar la espera para saber cuál de los dos hará historia y se convertirá en la primera mujer o el primer negro presidente.

El fenómeno del 'Supermartes' entró a formar parte del complicado proceso electoral estadounidense en los años 80, y desde entonces, cada vez son más los estados que celebran en ese día tanto primarias como caucuses en un intento por tener 'algo que decir' en la designación de los candidatos y no pronunciarse cuando ya sea demasiado tarde.

Mañana habrá primarias y caucuses demócratas y republicanos en 19 estados, entre ellos algunos de la talla de California, Nueva York, Nueva Jersey o Massachusetts, donde están en juego un número importante de delegados, mientras que hay tres citas previstas sólo demócratas y otras dos sólo republicanas.

Sin embargo, el sistema de elección de delegados es distinto en los dos partidos, lo que en el caso de los demócratas amenaza con dejar abierta, por lo menos unas semanas más, la lucha por una plaza para las presidenciales de noviembre. En el partido demócrata, la distribución de delegados se hace principalmente de manera proporcional en función de los votos obtenidos, mientras que en el caso republicanos, son muchos los estados en los que el total de delegados se atribuyen al ganador.

Así las cosas, y dada la cada vez más reducida ventaja que existe entre Clinton y Obama, todo hace presagiar que ninguno de los dos saldrá tan reforzado del 'Supermartes' como para proclamar victoria, puesto que todavía quedarán en juego cerca de la mitad de los delegados demócratas --están en juego 1.681 delegados del total de 4.364 delegados que participan en la convención demócrata--.

EMPATE CLINTON-OBAMA

Los últimos sondeos publicados estos días muestran casi un empate técnico entre la senadora por Nueva York y el senador por Illinois, y de hecho, el publicado hoy por la CNN da a este último una mínima ventaja. De acuerdo con la cadena, Obama obtendría el 49% del respaldo y Clinton el 46%, con un margen de error del 4,5%. Hace dos semanas, la precandidata contaba con un respaldo del 42% frente al 33% de su rival.

Según el sondeo difundido ayer por la CBS, tanto Clinton como Obama cuentan con el respaldo del 41% de los votantes demócratas en las primarias, habiendo recortado el segundo 15 puntos a la ex primera dama respecto a principios de enero. En este caso el margen de error es del 3%.

Sin embargo, y pese a la remontada de Obama, al que apoyan la mayoría de los hombres --tiene una ventaja de 12 puntos-- y que ha recuperado 11 puntos entre las mujeres, si se tienen en cuenta sólo a los votantes de los estados en liza en la cita de mañana, la senadora mantiene una ventaja más clara respecto a su rival, con el 49% del apoyo frente al 31%, si bien hay un 16% de electores indecisos.

La encuesta de Gallup para el 'USA Today' también coincide en la mejoría de Obama entre el electorado demócrata. Así, Clinton contaría con un respaldo del 45% mientras que Obama tendría el 44%, con un margen de error del 4%. Además, el sondeo también confirma la tendencia de un mayor respaldo de las mujeres al senador por Illinois. Así, Clinton cuenta ahora con el respaldo del 48% de las féminas y su rival con el 42%, mientras que esta cifra hace dos semanas era de 50% y 31% respectivamente.

Pero también, y pese a los esfuerzos de Obama por presentarse como candidato de cambio y no como el 'candidato negro', cada vez cuenta con un mayor respaldo entre los electores de raza negra. Así mientras el 49% de los blancos apoyan a Clinton y el 39% a su rival, Obama cuenta con el respaldo del 63% de los negros, frente al 25% de la senadora.

VENTAJA DE McCAIN

Entre los republicanos, y pese a que hace unos meses nadie apostaba porque llegaría tan lejos, John McCain se ha consolidado entre los electores de su partido e incluso mañana mismo podría dejar sentenciada su elección, lo que constituiría todo un hito en las elecciones estadounidenses, ya que en los últimos 20 años ningún candidato de ninguno de los dos partidos contó con el apoyo de suficientes delegados para su elección antes de marzo.

Los últimos sondeos confirman que McCain, un veterano en las presidenciales, es el favorito de los demócratas y le dan una amplia ventaja sobre su más directo rival Mitt Romney. Según el sondeo de la CBS, el senador por Arizona cuenta con el respaldo del 46% de los electores republicanos, mientras que Romney sólo cuenta con el apoyo del 23% y el tercero en discordia, el ex gobernador de Arkansas Mike Huckabee, tiene el 12%.

En el caso de la encuesta de 'USA Today', McCain cuenta con una ventaja inferior sobre Romney, con el 42% y el 24% respectivamente, mientras que Huckabee conseguiría un resultado mejor, con el 18%. Pese a la ventaja, desde la campaña de Romney recuerdan que los sondeos a nivel nacional "dicen muy poco" de lo que realmente ocurre en los estados.

De hecho, el propio McCain asegura "estar muy nervioso" ante la cita de mañana porque "ya he visto esta película antes". "Mi trabajo es mantener nuestros niveles de expectativa bajos y no levantar expectativas hasta un nivel en el que pudiéramos llegar a sufrir algún revés", afirmó este fin de semana. "Ha habido tantos altibajos en esta campaña como para pensar que tendremos una nominación tranquila", remachó, aunque reconoció que es "cautamente optimista".

Pero Romney no da todo por perdido. "Esta es una carrera ajustada y que pretendo ganar", aseveró, admitiendo que tanto él como McCain están luchando con "su corazón y su alma" por ser el candidato republicano a la Casa Blanca.

Tampoco Huckabee parece haber tirado la toalla, si bien desde la renuncia del ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani a su candidatura son muchos los que piensan que el antiguo pastor protestante será el próximo en decir adiós a su sueño de ser presidente. "Creo que hay que recordar que la gente va a hacer su elección, no los expertos nacionales", subrayó.